Finalmente, el Consejo de la UE y el Parlamento Europeo se han puesto de acuerdo y han fijado en seis meses el plazo para que compañías aéreas como Iberia, con parte de su accionariado británico, adapten su estructura en caso de una salida del Reino Unido de la UE sin acuerdo. En un principio, el Parlamento había aceptado dar un margen de un año para esta adaptación, pero este martes, las dos instituciones europeas han pactado que el plazo se reduciría a la mitad.
El acuerdo fija un calendario más estricto de lo previsto para la compañía española. Desde el Parlamento Europeo precisan, sin embargo, que se ha logrado suprimir la fecha fija para la reestructuración del accionariado, que exigía la consumación del cambio accionarial antes del 26 de octubre de este año, publica El País.
El texto pactado elimina esa fecha y establece que los seis meses empezarán a contar desde la entrada en vigor del Reglamento, que podría retrasarse si el Brexit no se ejecuta el 29 de marzo, como está previsto, sino más adelante, como parece cada vez más probable…
