Desde que Chile adoptó la política de cielos abiertos como camino de desarrollo para la industria aérea comercial, distintas aerolíneas han ingresado al territorio nacional. Prueba de ello son las llegadas de British Airways y Alitalia, que hoy cuentan con cuatro y cinco frecuencias por semana, respectivamente. Pese a ello, es una cantidad menor en comparación con las frecuencias de Iberia, Air France y KLM.
Esta política de cielos abiertos -en la que Chile ofrece, bajo ciertas autorizaciones, libertad a compañías extranjeras para volar en el territorio nacional- ha generado que el país sea atractivo para los operadores aéreos internacionales. Sin ir más lejos, actualmente hay cinco líneas aéreas que están tramitando su certificado de operador aéreo (AOC, air operator’s certificate , en inglés) ante la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC): la emiratà Emirates, la low cost argentina Flybondi, las estadounidenses Dynamic International Airways y One Sky, y la peruana Peruvian Airlines. El secretario general de la Junta Aeronáutica Civil (JAC), Jaime Binder, destacó que «el alto interés para operar en Chile radica en sus reglas estables y claras, y en una política pro libre competencia. Eso genera menores precios y más opciones para los pasajeros».
En cuanto a las firmas, Emirates busca operar en la ruta Santiago-Sao Paulo-Dubái. Flybondi, en tanto, espera volar entre Santiago y distintos puntos de Argentina a fines de año. Dynamic es una empresa dedicada a chárter, que el año pasado realizó operaciones no regulares entre Santiago y Puerto Príncipe.