Al turista le aburre tener que hacer conexiones, especialmente al que es de negocios.
Con eso en mente, la región, que ya es potencia en turismo de negocios, se prepara en materia aeroportuaria para estar al nivel de operación exigido por los estándares de calidad del sector.
Y con las obras de ampliación del aeropuerto José María Córdova de Rionegro (Oriente), se logra un importante avance, pues según la ingeniera Sara RamÃrez, gerente general del concesionario Airplan S.A., se garantiza un óptimo servicio para la próxima década.Con estos trabajos, que contaron con una inversión de 350.000 millones de pesos, el aeropuerto tiene mayores zonas en los muelles nacional e internacional, espacios modernizados y más lugares para parqueo de aeronaves.
"Ahora solo resta conectarnos con el mundo. Si logramos cambiar la normativa para que más vuelos directos vengan a este aeropuerto, el crecimiento será mucho mayor al actual, que está entre 6 y 8 por ciento al año", explicó la gerente.
A pesar de ser el segundo terminal aéreo más importante del país, el José María Córdova (JMC) aún está lejos de El Dorado de Bogotá, que moviliza cerca de 30 millones de pasajeros por año.Es decir, aproximadamente cuatro veces más que el JMC que, según la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), movilizó el año pasado a 7"™567.624 pasajeros. Ese mismo año, se registraron 81.846 operaciones aéreas.
."Considero que la política aerocomercial puede realizarse un poco más rápido para dejar de ser un país cerrado. La razón más importante del servicio del transporte aéreo no son los agentes de la industria, sino la conectividad de los ciudadanos y su carga", opinó RamÃrez.
Por eso, propuso que se debe dar el otorgamiento de un permiso aeronáutico que se denomina Quinta libertad del aire, que es el derecho de tomar y de desembarcar pasajeros, correo y carga, con destino o procedente de terceros estados.
"El país tiene unas políticas que les da a los operadores aéreos unas tercera y cuarta libertad de aire, es decir, que por ejemplo, si una aeronave viene de Santiago de Chile a Medellín solo puede regresar con pasajeros al mismo destino. Pero si se dan quintas libertades, ese mismo avión que viene de Chile, deja pasajeros o carga en Medellín, y puede seguir hacia otro destino. Eso le da mucha más flexibilidad al transporte aéreo y hace más atractivo al aeropuerto", explicó la ingeniera.Y eso es lo que necesita la región, teniendo en cuenta el aumento del turismo receptivo, el cual ha mostrado un crecimiento interanual de llegada de turistas extranjeros del 11,6 por ciento, según Airplan…