Después de más de tres meses de la apertura del nuevo aeropuerto de Tababela, no se ha establecido una fecha para poner en funcionamiento el Sistema Instrumental de Aterrizaje (ILS, por sus siglas en inglés), de la pista 18 para los aterrizajes desde el norte. Según Quiport, concesionaria de la terminal, la Dirección General de Aviación Civil (DGAC) está en proceso de calibración del sistema. Sin embargo, ninguna de las dos instituciones da un plazo fijo para el inicio de operaciones de ILS de la cabecera norte, donde ya se encuentran instaladas las antenas, sin funcionamiento.
Está previsto que con este sistema de precisión en las dos cabeceras del aeropuerto (norte y sur), se reduzcan los cierres de operaciones por efectos del clima invernal que atraviesa la zona de Quito y sus alrededores, que incluye el aeropuerto. Desde su apertura funciona el sistema ILS de la pista 36 para los aterrizajes desde el sur.
El ILS se compone del equipo en tierra que emite las señales, y del equipo a bordo del avión que las procesa y las muestra al aviador en un instrumento para poder navegar. El sistema guía al piloto, horizontal y verticalmente, hacia la pista del aeropuerto hasta que pueda conseguir suficientes referencias visuales para poder continuar la aproximación y aterrizar. Antes del inicio de operaciones de la terminal, el pasado 20 de febrero, el Municipio anunció que el aeropuerto «cuenta con mucha mayor amplitud, equipos de radio-ayudas modernas que permiten llegar con más facilidad, inclusive cuando la visibilidad y el techo sean reducidos».
Sin embargo, la semana pasada se suspendieron las operaciones en la terminal por más de una hora y media en dos ocasiones debido al clima. En lo que va de este mes, la terminal aérea ha informado de tres cierres: el último fue el jueves 9 de mayo; otro el 6 de mayo, que duró casi dos horas desde las 06:30; y el 1 de mayo, entre las 18:15 y 19:00.
Todos por el mal clima. Según el Municipio, los descensos instrumentales fueron diseñados de acuerdo con la normativa Organización Internacional de Aviación Civil (OACI, por sus siglas en inglés), tomando en cuenta las condiciones meteorológicas del nuevo aeropuerto cuyos estudios realizó la DGAC en el sector de Puembo para medir los vientos, temperaturas promedio y humedad durante 21 años. Estos estudios revelan que los vientos predominantes en el nuevo aeropuerto soplan de norte a sur y solo un 4,1% vienen del este, factor que fue considerado para la orientación de la pista y el aterrizaje de las naves para que la afectación por el mal clima sea mínimo.
Otra de las medidas anunciadas por Quiport para disminuir los cierres de operaciones por el clima, es la instalación del sistema RVR. Este equipo permitirá medir de manera automática y precisa los niveles de visibilidad, reduciendo así la posibilidad de error humano al momento de interpretar las condiciones climáticas.
Finalmente, se analiza también la opción de instalar luces de centro de pista para mejorar la operatividad en condiciones de baja visibilidad. Actualmente, la pista cuenta con 144 unidades de luces de borde y 374 en la calle de rodaje. Cada lámpara tiene el rango de 100 a 900 vatios. Tampoco hay una fecha definida para la ejecución de estas medidas. Tecnología y ubicación Navegación aérea. "‚El aeropuerto cuenta con el sistema RNAV que consigue «saltarse» diversas radioayudas en el trayecto del avión para lograr una ruta recta y directa a la estación. Pista. "‚Está ubicada 400 metros más bajo que en el viejo aeropuerto, lo que posibilita que las aeronaves puedan despegar con mayor capacidad de pasajeros y de carga, sin necesidad de realizar escalas.