El aeropuerto londinense de Heathrow informó hoy de que confía en que no subirá las tasas de aterrizaje, que son trasladadas al precio del billete que pagan los pasajeros, pese a la expansión de sus instalaciones.
El aeropuerto, ubicado al oeste de la capital británica, anunció que espera poder mantener las tasas «cercanas a los niveles actuales» en la construcción de una tercera pista de aterrizaje porque retrasarán la edificación de una sexta terminal.
Un portavoz sostuvo hoy que «efectivamente» esperan «poder ampliar el aeropuerto y que los pasajeros paguen lo mismo que pagan ahora».
«Fue clave para que el Gobierno aprobara el proyecto que se pudiera hacer de forma asequible, así como para nuestras compañías aéreas asociadas», apuntó.
La ampliación del aeropuerto fue aprobada por el Gobierno británico en el Parlamento el pasado mes de octubre pese a la oposición de grupos ecologistas, asociaciones de vecinos y políticos, entre ellos el alcalde de Londres, el laborista Sadiq Khan.
Según la comisión de expertos que elaboró el informe en el que el Ejecutivo basó su decisión, la ampliación de las instalaciones permitirá crear unos 70.000 empleos para 2050 y aportará un crecimiento al país de 147.000 millones de libras (165.000 millones de euros) en 60 años.
Se calcula que la nueva pista, que se estrenaría en 2025, tendrá un coste de 18.600 millones de libras (20.800 millones de euros) y conllevará derribar unas 800 viviendas y modificar la red de carreteras y la ferroviaria…
