La fabricante de aeronaves brasileña Embraer dijo este lunes que se defenderá de una demanda impulsada por legisladores de izquierda, que apunta a detener el intento de Boeing Co por adquirir la mayor parte de su unidad de aviones comerciales, el último dolor de cabeza para el acuerdo propuesto.
La demanda, presentada por cuatro congresista del Partido de los Trabajadores en contra del Gobierno federal y de Embraer, busca un mandato judicial para congelar las conversaciones entre las dos compañías, aseguró la firma brasileña.
Aunque Embraer es una compañía privada, el Gobierno mantiene una acción especial que le garantiza poder de veto sobre importantes decisiones de negocios.
La acción judicial es solo el último problema para un acuerdo que ha suscitado críticas de sectores preocupados por el impacto sobre los empleos en el país sudamericano y los que temen sobre la viabilidad financiera de Embraer sin su lucrativa unidad de aviones comerciales.
El pacto propuesto con Boeing no incluirá las unidades de defensa y aviones ejecutivos, donde el Gobierno brasileño mantendría poder de veto.
Un juez laboral de Brasil rechazó este mes un pedido para hacer que la adquisición propuesta dependa de un compromiso para preservar todos los puestos de trabajo a nivel local de la compañía…