El fabricante de aviones brasileño Embraer ha reforzado en los últimos años sus productos y ventas en el sector de defensa y seguridad, y aspira a convertirse en un gran actor del ramo, con apoyo del Gobierno de su país.
Tercer fabricante mundial de aviones comerciales detrás de Boeing y Airbus, Embraer prevé un aumento de ventas de 25% en su sector de defensa este año, informó el presidente de Embraer Defensa y Seguridad, Luiz Carlos Aguiar, al margen de la LAAD, el mayor salón de defensa celebrado esta semana en Rio.
Entre 2006 y 2012, el sector de defensa de Embraer creció un promedio de 29% anual en ventas, y pasó de representar un 6% de los ingresos totales de la empresa, a 17%. Entre este año y 2020, Embraer espera que su área de defensa y seguridad aumente 12% en ventas, indicó Aguiar.
El año pasado, Embraer facturó por sus productos de defensa y seguridad 1.056 millones de dólares, superando por primera vez el umbral de los 1.000 millones de dólares.
«El gobierno quiere privilegiar a Embraer y convertirlo en un gran actor de defensa, y ya no sólo del sector aeroespacial», dijo a la AFP Nelson During, experto brasileño en defensa y director del sitio ‘web’ Defesanet.
«Embraer quiere expandirse y diversificar el número de productos, para no depender sólo de sus aviones comerciales, que son muy susceptibles a las crisis, como ocurrió en 2008», añadió.
Una de las apuestas de la brasileña es el desarrollo de productos de vigilancia (radares, sistemas electrónicos) y «será un competidor privilegiado en todos los llamados a licitación venideros», afirmó.
Para ayudar a Embraer, el estatal banco de fomento BNDES, brazo de inversión del gobierno, creó una línea de crédito que financiará las compras de seis aviones de combate Super Tucano A-29 por parte de Guatemala, y de tres por parte de Senegal, anunciadas esta semana.
«Hay una línea de crédito como parte de la estrategia destinada a defensa», explicó Aguiar a periodistas. «No es muy diferente de lo que vemos en todo el mundo».
Para Embraer y para el sector de defensa brasileño en general, «esta ayuda del gobierno es fundamental», estimó During.
El BNDES y el gobierno ya apoyan desde hace años las ventas de aviones comerciales de Embraer, permitiéndole ofrecer condiciones de financiamiento compatibles con las de empresas competidoras.
El Gobierno brasileño está empeñado en desarrollar una gran industria nacional de Defensa.
La implementación del Sistema Integrado de Vigilancia de Fronteras (SISFRON) que impulsa el gobierno brasileño supondrá para Embraer negocios millonarios, dijo During.
Actualmente, el SISFRON -una compleja red de aviones no tripulados, radares, sensores y sistemas de comunicaciones- está en una fase experimental, instalado en unos 650 km en la frontera del estado de Mato Grosso do Sul con Paraguay y Bolivia. Luego deberá extenderse a sus 16.000 km de fronteras con nueve países vecinos y el territorio de la Guayana Francesa, a un costo estimado de 6.000 millones de dólares.
«Es un programa por 700 millones de reales (unos 350 millones de dólares) en su fase inicial, que da gran Ãmpetu a los contratos de Embraer (…). Puede llegar a varios miles de millones, Embraer tendrá una parte muy significativa en este contrato», señaló During.
Embraer también inauguróÂ la campaña de venta de su nuevo avión de transporte militar KC-390, el mayor fabricado por la aeronáutica brasileña y desarrollado en asociación con Argentina, Chile, Colombia, Portugal y República Checa. Su meta es vender 728 unidades a 77 países, por un valor de más de 50.000 millones de dólares.
Embraer está «preparada» para entrar a este mercado, dominado por el C-130 Hércules de la estadounidense Lockheed Martin, y su KC-390 será vendido a precios «menores que los ofrecidos por la competencia», dijo Aguiar a periodistas, sin divulgar valores.
Aviones similares son vendidos en 90 a 125 millones de dólares, pero Embraer será «mucho más competitiva», sostuvo.
El contrato firmado esta semana por Embraer con Guatemala para la protección de la Reserva de la Biósfera Maya incluye, además de seis Super Tucanos, tres radares tridimensionales y un sistema de comando, así como apoyo logístico a las operaciones aéreas y entrenamiento para pilotos y mecánicos.
El contrato con Senegal, en tanto, prevé apoyo logístico a las operaciones aéreas y la instalación de un centro de entrenamiento de pilotos y mecánicos.
Embraer también anuncióÂ un contrato con la Fuerza Aérea Brasileña por unos 127 millones de dólares para «soporte logístico y servicios» a su flota de 92 Super Tucanos.