Las pruebas realizadas a pilotos fallecidos en accidentes durante más de dos decenios muestran un aumento en el uso de fármacos tanto legales como ilegales, entre ellos algunos que pueden afectar la capacidad para pilotar, según un estudio dado a conocer el martes por la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB).
El estudio examinó los informes de toxicología de casi 6.700 pilotos fallecidos en accidentes entre 1990 y 2012. No sólo aumentó la cantidad de pilotos que habían consumido un fármaco, sino también más de uno. La cantidad de pilotos que dieron positivo a por lo menos un fármaco aumentó de 9,6% a 39%, mientras que los positivos a dos aumentaron de 2% a 20%. En el caso de tres fármacos, la cifra subió de cero a 8,3%.
Durante el mismo período se comenzaron a usar nuevos medicamentos y la población estadounidense envejecía, lo que creó una mayor demanda de fármacos. Las pruebas toxicológicas «reflejan tendencias en la población general y probablemente indican un alza significativa en el consumo de fármacos» por parte de los pilotos también.
Sin embargo, la cantidad de accidentes que la Junta ha investigado en que se determinó que cierta disfunción en la capacidad de vuelo se debió a un medicamento no ha aumentado significativamente, indicó el informe. La NTSB indicó que los efectos de fármacos en los pilotos han sido causa o factor en accidentes fatales de aviación civil en aproximadamente 3% de los casos desde 1990.
Chris Hart, presidente en funciones de la NTSB, dijo que la entidad «está preocupada por las posibles implicaciones de seguridad debido al aumento en el uso de fármacos en todos los tipos de transporte», y calificó el informe de «un importante primer paso para comprender esas implicaciones».
La doctora Mary Pat McKay, principal funcionaria médica de la Junta, dijo que el estudio se limitó a la aviación porque no se usan existen pruebas de similar calado en los accidentes fatales de carretas, ferrocarriles y barcos. McKay agregó es probable que esas modalidades de transporte se presenten las mismas tendencias.
La Junta también aprobó emitir una alerta de seguridad a los pilotos para advertir del riesgo de afectación a la capacidad de pilotar por la ingesta de muchos medicamentos de venta libre.
La junta emitió varias recomendaciones a la Administración Federal de Aviación y a los gobiernos estatales destinadas a mejorar la comunicación de los riesgos del uso de drogas a los pilotos y operadores.
Más de 9 de cada 10 pilotos sometidos a las pruebas eran de aviones privados y no de aerolíneas, y 98% eran varones. La edad promedio de los pilotos fallecidos también se incrementó marcadamente, de 46 años en 1990 a 57 en 2012. La edad promedio de los pilotos muertos era de 5 a 15 años mayor que la de la población general de pilotos activos.
Las pruebas también revelaron un aumento en el uso de todo tipo de fármacos, como los que pueden afectar la capacidad de vuelo de un piloto, así como otras para tratar enfermedades potencialmente disfuncionales como convulsiones y enfermedades mentales.
El medicamento que más se encontró en los pilotos fue un antihistamínico que provoca somnolencia y es un ingrediente clave en muchos fármacos de venta libre para resfriados, alergia y para dormir.
Los sedantes antihistamínicos en general fueron hallados en 9,9% de los pilotos examinados en los últimos cinco años del estudio, un aumento con respecto al 2,1% de los casos durante los primeros años estudiados…