Pérdidas valoradas en 34 millones de dólares estadounidenses registró en el primer trimestre el fabricante aeronáutico y ferroviario canadiense Bombardier, informó ayer la compañía.
Sin embargo, esta empresa, mayor fabricante mundial de material ferroviario y uno de los principales de aeronaves, en igual período el año precedente reportó ganancias de 170 millones de dólares.
Las pérdidas de la etapa enero-marzo de 2016 se atribuyeron a la caída de los ingresos, los cuales mermaron en un 11 por ciento y se ubicaron en tres mil 914 millones de dólares.
En el comunicado la compañía también precisó que por segmentos, las entradas monetarias de la unidad de aviones de negocios cayeron un 15 por ciento, a mil 303 millones de dólares, con la venta de de 31 aparatos, un 31 por ciento por debajo que igual lapso de 2015.
A su vez, la unidad de aviones comerciales ingresó 616 millones de dólares, lo que supuso un declive del ocho por ciento, con la entrega de 20 unidades, un 13 por ciento inferior a similar período.
Por su parte, la unidad de aeroestructuras y servicios de ingeniería obtuvo 468 millones de dólares, el uno por ciento menos, mientras que la de transporte, fabricante del material ferroviario, redujo sus entradas en mil 880 millones de dólares, es decir un ocho por ciento menos.
No obstante estas malas noticias del trimestre, Bombardier informó que la aerolínea estadounidense Delta Airlines realizó un pedido de 75 unidades del reactor CS100 por valor de cinco mil 600 millones de dólares. El contrato incluye la opción de compra de otras 25 unidades de ese tipo de reactor.
De acuerdo con expertos, la solitud de Delta es la mayor que la compañía canadiense ha recibido de su Serie C de aviones, un proyecto que ha sufrido numerosos retrasos y causado graves dificultades económicas a Bombardier, cuya sede está en la provincia de Quebec…