El Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México (GACM) modificó el pasado 19 de abril el contrato de construcción del edificio terminal del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), que debía estar concluido a más tardar el 20 de octubre del 2020, fecha en que el gobierno federal aseguraba que se tendría que inaugurar, y postergó el día de entrega.
La nueva fecha para que el consorcio Constructora Terminal del Valle de México (donde participa ICA, Cicsa, GIA, Prodemex y La Peninsular, entre otras empresas) termine es el 7 de noviembre del 2020. Dicha obra es la más costosa del proyecto: 98,400.9 millones de pesos.
“Era previsible la modificación del contrato, aunque el nuevo plazo es muy, muy, corto. Seguramente se tendrán que hacer otros ajustes como lo plantea la Ley de Obras Públicas para evitar sanciones a las empresas. Se está trabajando a marchas forzadas y de todas maneras no creo que den los tiempos originales”, comentó un residente de obra ligado a la construcción que pidió que no se mencione su nombre.
El argumento reconocido por las partes que firmaron el documento fue la entrega tardía del sitio de trabajo, lo que motivó que las constructoras no pudieran iniciar sus labores el 13 de febrero del 2017, como está referido en el contrato original, lo que hicieron hasta el 23 de marzo del mismo año.
Además de modificar la fecha de terminación del edificio terminal, se ajustó el plazo otorgado a las empresas, al pasar de 1,346 días naturales a 1,326. En ambos casos, hubo total consentimiento de los involucrados.
El primer convenio modificatorio relacionado con la construcción del edificio terminal fue firmado, entre otros, por el director corporativo de Construcción lado tierra, Raúl González Apaolaza, y los representantes del consorcio Constructora Terminal del Valle de México, que incluye a Luis Horcasitas Manjarrez…