Noruega, Polonia y Lituania se han sumado a la iniciativa iTEC, impulsada por los proveedores de servicios de navegación de España, Reino Unido y Alemania
El «rotundo éxito» de la puesta en servicio a principios de año de un nuevo sistema de gestión del tráfico aéreo en el centro de control de Prestwick (Escocia), que emplea la tecnología de nueva generación de Indra, ha atraído la atención de los centros de control de Noruega, Polonia y Lituania, que se han sumado recientemente a los de los principales países del continente, que ya apuestan por la tecnología de la compañía.
El programa de desarrollo iTEC, que ha logrado poner en operación una tecnología capaz de cambiar la forma en que se controla el espacio aéreo, fue impulsado años atrás por los proveedores de servicios de navegación de España (Enaire), Reino Unido (NATS) y Alemania (DFS) en colaboración con Indra como socio tecnológico.
En el mes de julio, NATS anunció que había completado con éxito el proceso de transición a iTEC en Prestwick y «apagaba» definitivamente el viejo sistema que venía sirviendo de respaldo. Desde entonces, el centro escocés se apoya exclusivamente en la tecnología de Indra para gestionar uno de los espacios aéreos más complejos de Europa, que controla 2,2 millones de kilómetros cuadrados y el 80% por ciento del tráfico aéreo del Atlántico Norte.
El director de Gestión de Tráfico Aéreo para Europa de Indra, Gonzalo Gavín, explica que Prestwick se ha convertido «en uno de los primeros centros de control del mundo en dar el salto tecnológico a un sistema de gestión de vuelos basado en trayectoria».
En este sentido, Indra añade que la entrada en operación de iTEC ha atraído la atención de todo el sector y ha terminado de convencer a nuevos proveedores de servicios de navegación, que han ido sumándose a esta iniciativa.
La primera incorporación más allá de los socios fundadores se produjo en 2014, cuando el proveedor holandés LVNL se sumó a iTEC de la mano de la alemana DFS. En junio de este mismo año se han incorporado la empresa responsable del tráfico aéreo en Noruega, Avinor, con el respaldo de NATS, y en julio lo hicieron la polaca Pansa y la lituana Oro Navigacija.
«Con estas nuevas incorporaciones, los principales centros de control europeos han pasado a abrazar la tecnología de última generación de Indra. Estos centros son además responsables de la gestión de los espacios aéreos más complejos y con más tráfico del continente y, en muchos casos, del mundo», subraya la compañía.
En este sentido, remarca que el hecho de que empleen un mismo sistema facilitará el intercambio de datos entre ellos a la hora de transferir la gestión de un vuelo que cruce sus fronteras. Gavín afirma que esto ayuda a «terminar con la fragmentación del cielo en Europa y permite avanzar en la construcción del Cielo Único en el continente».
Ventajas de iTEC
Indra subraya que el tráfico aéreo en Europa crece de forma rápida y amenaza con saturar el espacio aéreo e incide en que abordar el problema pasa por renovar completamente la forma en que se gestiona.
El revolucionario sistema iTEC de gestión de tráfico aéreo por trayectoria de Indra ofrece una exactitud «sin precedentes» a la hora de predecir la posición de cada aeronave en cualquier momento de su ruta. De esta manera, el aeropuerto de destino puede saber a qué hora aterrizará una aeronave en sus pistas «con un margen de error de sólo de unos pocos segundos, incluso antes de que la propia aeronave despegue en origen», explica Gavín.
Esta capacidad de predicción eleva notablemente la seguridad y permite además que las aeronaves puedan elegir la ruta directa a su destino, lo que hace que se puede abandonar la vieja forma de volar basada en el empleo de rutas predefinidas, por lo general más largas. Como ejemplo, Gavín comenta que «un ahorro de solo tres minutos al escoger una ruta más directa puede representar ahorros al año de más de 100 millones de euros»…