Este 4 de octubre, el gobernador Andrew M. Cuomo de Nueva York anunció un plan de inversión de 13 mil millones de dólares (mdd) para la remodelación y construcción de dos nuevas terminales aéreas en el Aeropuerto Internacional John F. Kennedy.
Una de las terminales, que se ubicará en el lado sur del aeropuerto y abarcará una superficie de 270 mil metros cuadrados, tendrá una inversión de siete mil mdd. Será diseñada por un consorcio de cuatro aerolíneas: Lufthansa, Air France, Japan Airlines y Korean Air Lines.
El objetivo de esta terminal será reemplazar a la actual Terminal 1 (de 20 años de edad), la Terminal 2 (de 56 años de edad) y ocupar el área vacante de la Terminal 3 (demolida en 2014).
Una vez completada, superará en 185 mil metros cuadrados el espacio de las tres terminales juntas, además contará con 23 puertas internacionales, de las cuales, 22 estarán diseñadas para recibir aviones de fuselaje ancho como el Dreamliner o el A380.
De igual forma, la denominada Terminal Sur contará con 24 pasillos de seguridad, 21 mil metros cuadrados de restaurantes y otros comercios, casi once mil metros de salones de aerolíneas, y más de cinco mil metros de áreas verdes, zonas infantiles y exposiciones.
Por su parte, la nueva Terminal Norte contará con un presupuesto inicial de tres mil mdd y una extensión de 111 mil metros cuadrados. La aerolínea JetBlue será la encargada de desarrollar esta infraestructura.
Para este proyecto, se demolerá la Terminal 7 (de 47 años de edad) y se combinará con el espacio vacante de la antigua Terminal 6 (demolida en 2011) para crear una terminal internacional conectada con la actual Terminal 5 (recién inaugurada en 2008).
Esta nueva terminal contará con 12 puertas internacionales –todas capaces de recibir aviones de fuselaje ancho–, y espacio para casi siete mil metros de comercios, dos mil 800 de salones privados de aerolíneas y mil 400 metros de espacio recreativo…
