Varias aerolíneas europeas, entre ellas la líder, Ryanair, están adoptando una nueva tecnología digital que puede revolucionar y simplificar las compensaciones que los pasajeros han de recibir por los retrasos en los vuelos, siguiendo las disposiciones legales en vigor.
El nuevo modelo permite añadir valor inmediatamente a los pasajeros, sin necesidad de papel, sin necesidad de integración electrónica con la aerolínea, y permiten una relación simple con el proveedor de los servicios en el aeropuerto.
La nueva mecánica la maneja la aerolínea, opera en segundos y consiste en dar un valor económico, el de la compensación por el retraso, a un código de barras que está en la tarjeta de embarque. De esta forma, cuando se va a un bar o cafetería incorporado al servicio, ya se reconoce allí el valor adicional. Si se usa un teléfono móvil para hacer el embarque, la operativa funciona de la misma manera.
Hay un proveedor de estos servicios que se ha convertido en el enlace entre los proveedores de los aeropuertos y las aerolíneas. Opera ya en 100 aeropuertos en Europa y espera en lo que queda de año extenderse al resto del mundo…