El proyecto para el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) provocó controversias entre integrantes del gabinete del presidente Andrés Manuel López Obrador.
El jueves, el secretario de Turismo de México, Miguel Torruco declaró que el proyecto del nuevo aeropuerto en Santa Lucía se destinará para los vuelos internacionales mientras que el Aeropuerto Internacional de Ciudad de México (AICM), se encargará de los vuelos nacionales. «Ya se decidió: va a ser Santa Lucía el internacional y el de la Ciudad de México el nacional. Va a haber un gran proyecto aeroportuario metropolitano con el de Toluca, como lo hacen todos los países del mundo sin cerrar sus aeropuertos», indicó durante su primera conferencia de prensa.
De acuerdo con el titular de la Secretaría de Turismo (Sectur), no existe problema con el aeropuerto de Santa Lucía, ya que detonará la economía en la zona. Informó que la terminal de la capital será remodelada para hacerla más fluida mientras que el aeropuerto de Toluca servirá de complemento. «Tendremos una red metropolitana digna para seguir creciendo de manera digna en materia turística», afirmó.
Sin embargo, horas después, Javier Jiménez Espriú, Secretario de Comunicaciones y Transportes, desmintió lo dicho por Torruco. «Es una información errónea», declaró en una entrevista con Milenio Televisión. Los tres aeropuertos (AICM, Toluca y Santa Lucía), serán nacionales e internacionales, afirmó el secretario Jiménez Espriú.
Anteriormente, el centro de investigación estadounidense Mitre, especializado en navegación aeronáutica, criticó el plan del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, de cancelar el aeropuerto de Texcoco para operar de manera simultánea el Aeropuerto Internacional de Ciudad de México y el de la base militar de Santa Lucía, bajo el argumento de que traería una complejidad innecesaria.
Esto después que el proyecto de construir un aeropuerto en el municipio de Texcoco (al nororiente de la Ciudad de México), iniciado por el ex presidente Enrique Peña Nieto, fuera rechazado en una consulta ciudadana convocada y realizada por el nuevo gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Desde antes de ser elegido, López Obrador criticó duramente este proyecto por considerar que tiene un costo muy alto, daños ambientales y presunta corrupción en la asignación de contratos.
En lugar de esta construcción, el mandatario propuso ampliar la base aérea militar de Santa Lucía, localizada al sur de la capital mexicana, para que opere a la par con el aeropuerto actual.
Igualmente, Alan Falomir Sáenz, diputado federal por Movimiento Ciudadano (MC), consideró que la propuesta del nuevo aeropuerto en Santa Lucía «es algo mal hecho y mal planeado por parte del gobierno federal. No hubo claridad en el gobierno de Peña Nieto y tampoco vemos que haya claridad en el gobierno de Andrés Manuel de que se haga una auditoría», declaró en entrevista para Infobae.
El diputado Falomir Sáenz dijo que por esta decisión los pasajeros, a través de la Tarifa de Uso Aeroportuario (TUA), que en promedio representa el 30% del costo de un boleto de avión, van a pagar una deuda de algo que ya no se va a realizar, en referencia al proyecto del aeropuerto de Texcoco. «Es una aberración la cancelación de Texcoco. Resulta evidente que el gobierno no tiene dinero para pagar estos bonos con los que ya se comprometieron», aseveró…
