El primer vuelo transatlántico de bajo costo desde Londres hasta América del Sur despegó este miércoles.
Las tarifas más económicas del trayecto entre la capital británica y Buenos Aires comienzan en US$360 por trayecto.
En la cabina, los asientos están apretujados y la comida y el equipaje no están incluidos en el costo del boleto, pese a lo cual este modelo de viaje sin lujos, que ha funcionado tan bien en vuelos de corta distancia, cada vez se está haciendo más popular para las rutas intercontinentales.
Una de las empresas pioneras en este esfuerzo -la misma que es responsable de la nueva ruta hacia Buenos Aires- es Norwegian.
Su llegada a Argentina esta semana es, realmente, apenas un primer aterrizaje pues tiene planes de establecer en ese país a partir de junio una nueva subsidiaria que disfrutará de una licencia para hacer hasta 152 rutas alrededor del continente.
La compañía, cuya sede central está en Noruega, rompió el récord ostentado por British Airways (BA) del vuelo transatlántico más rápido a bordo de un avión subsónico, al hacer el recorrido entre el aeropuertos JFK de Nueva York y el aeródromo de Gatwick, en Londres, en apenas cinco horas y 13 minutos.
Otras líneas de bajo costo, como las islandesas Wow y Primera, también intentan disputar los cielos sobre el Atlántico a las empresas más tradicionales como Air France-KLM o British Airways.
Crecimiento global
Norwegian se ha expandido rápidamente desde sus inicios en 1993 como una pequeña aerolínea regional que volaba entre las ciudades de Bergen y Trondheim.
Su fundador y director ejecutivo, Bjorn Kjos, es un piloto y exparacaidista que ha convertido a la empresa en la línea aérea más grande de Escandinavia y en la tercera de bajo coste más grande de Europa…