La empresa estadounidense Boeing prepara una serie de kits que entregarán a los técnicos de las distintas entidades reguladoras y aerolíneas a nivel mundial para instalar los cambios diseñados al software de los aviones B737 MAX.
De acuerdo con gente cercana a Boeing, la empresa norteamericana destinó a cerca de 1500 ingenieros para el desarrollo de estos kits, de cara a la recertificación de los aviones de fuselaje estrecho, la cual, esperan, se dé para inicios del último trimestre del año.
En este proceso, Boeing y las aerolíneas a nivel mundial tendrán que trabajar con tres distintos escenarios: los aviones que Boeing ya construyó (cerca de 250) pero no ha podido entregar y están en varios hangares en Estados Unidos; los aviones que construirá a partir del proceso de recertificación y, finalmente, los aviones que cada línea aérea tiene detenidos desde marzo de este año y que son cerca de 400.
Además, es probable que las autoridades de aviación del mundo no se alineen a las decisiones de la Administración Federal de Aviación (FAA) de los Estados Unidos y Boeing sobre la recertificación del B737 MAX, por lo que no hay garantía que la validación del jet suceda simultáneamente.
“No controlamos esa línea de tiempo (…) Vamos a trabajar con los reguladores y estamos avanzando. Pero si esa fecha de regreso al servicio cambia, afecta a todo lo demás”, señaló Dennis Muilenburg, CEO de Boeing a la agencia Reuters en agosto.
La compañía estadounidense dijo a los proveedores que espera que el avión vuele a principios de noviembre, no obstante una vez que se certifique, la empresa tendrá que movilizar los aviones almacenados, proceso que tomaría entre 100-150 horas por avión…