El jefe del Servicio Federal ruso de Seguridad (FSB, antiguo KGB), Alexandr Bórtnikov, atribuyó a un atentado la desaparición del avión A320 de EgyptAir, que se perdió ayer sobre el este del Mediterráneo, con 66 personas a bordo. "Por lo visto, es un ataque terrorista, a causa del cual murieron 66 ciudadanos de una docena de Estado", dijo el jefe de seguridad. Bórtnikov llamó a todos los interesados y "en particular a los socios de Europa a tomar medidas conjuntas para identificar a los individuos vinculados con ese acto atroz".
El aparato, un Airbus A320, desapareció del radar sobre las 00:45 GMT tras penetrar en el espacio aéreo egipcio poco más de un kilómetro y cuando se encontraba a unos 280 kilómetros de la costa de Egipto, según las autoridades de ese país.
En su interior viajaban 30 egipcios y 15 franceses, entre ciudadanos de otras nacionalidades. De sus ocupantes, 56 eran pasajeros, 7 tripulantes y 3 agentes de seguridad. Tras varias horas sin que se conociera cuál había sido la suerte del avión, dado por desaparecido, el presidente francés, François Hollande, anunció que el Airbus "se estrelló"…