El papa volvía contento de su viaje a Corea del Sur. Tras cinco días visitando el país asiático, Francisco ha vuelto en el avión contestando a las preguntas de los periodistas sin evitar ningún tema. Los conflictos bélicos, la tortura, su posible renuncia e incluso su vida privada salieron a relucir en el vuelo.
– «Podéis decirme: Si un día usted no se siente capaz de tirar para adelante, ¿haría lo mismo? SÃ. Rezaría y haría lo mismo".
– «Me preguntan si deseo ir a China, claro que sí. Mañana mismo. La Iglesia sólo pide libertad para hacer su oficio. Ninguna otra condición».
– «Vivimos en un mundo en guerra. ¡Por todas partes! Alguien me decía que estamos en la Tercera Guerra Mundial, pero a trozos, a capÃtulos».
– «La tortura es un pecado en contra de la humanidad y un delito de lesa humanidad».
– "Llamo a los países miembro de la ONU a tomar medidas para frenar la agresión injusta en Irak".
– "Estoy disponible para viajar al norte de Irak, al Kurdistán, para dar alivio a los refugiados y otras minorías si es necesario"…