En un control de rutina en el aeropuerto internacional de Ezeiza, se descubrió en octubre a un hombre de nacionalidad peruana, procedente de Chile, que transportaba monedas históricas cuyo origen no pudo explicar.
Luego de que la delegación local de INTERPOL descartara que sean objetos de robo, el Instituto Nacional de Antropología y Pensamiento Latinoamericano (INAPL) confirmó que las monedas eran un «material de interés arqueológico».
Con esa certeza, la AFIP notificó lo ocurrido a la Embajada del Perú, ya que la carga pertenecería al Patrimonio Cultural de esa república. El embajador José Luis Sánchez-Cerro agradeció esta tarde al organismo las acciones que permitieron la preservación y defensa del material
Las monedas, denominadas «Macuquinas» y acuñadas entre 1575 y 1652, serán repatriadas con los recaudos y bajo los procedimientos de rigor, en el marco del convenio bilateral celebrado entre ambas naciones, informó hoy la AFIP.
La «convención sobre las medidas que deben adoptarse para prohibir e impedir la importación, la exportación y la transferencia de propiedad ilícitas de bienes Culturales», aprobada en 1970 en París por la Conferencia General de la UNESCO, dispone que el ingreso al país de este tipo de mercaderías sin la debida autorización previa emitida por el Estado de la cual provienen tipifica como un hecho ilícito cuya sanción se encuentra prevista en el Código Aduanero, recordó la entidad.
Para estos casos, la Ley 25.568, que aprueba la «Convención sobre Defensa del Patrimonio Arqueológico, Histórico y Artístico de las naciones Americanas», prevé entre otras medidas de acción frente al saqueo y despojo que han sufrido los países del continente, principalmente los latinoamericanos, en sus patrimonios culturales…