En los últimos cinco años, al menos 15 aerolíneas internacionales han cesado sus vuelos desde Venezuela hacia el extranjero, y en 2018, la situación continúa en picada. En enero, la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), cerró sus oficinas en el territorio nacional, y se trasladó a Panamá, país con el que el Gobierno venezolano afronta una delicada relación diplomática.
A finales de marzo, la nación centroamericana sancionó a 55 funcionarios connacionales, entre ellos, Nicolás Maduro, Diosdado Cabello, Néstor Reverol, Maikel Moreno, Adán Chávez y las rectoras del Consejo Nacional Electoral (CNE); razón por la que el Ejecutivo decidió suspender, por 90 días prorrogables, los vuelos de la Compañía Panameña de Aviación S.A (Copa Airlines), la cual, realizaba más de 35 viajes semanales. En este sentido, el Instituto Nacional de Aeronáutica Civil (INAC), emitió un comunicado en el que alegaba la decisión como una medida para proteger el sistema financiero venezolano y prevenir la delincuencia organizada y el financiamiento al terrorismo.
La suspensión de la aerolínea encendió las alarmas del Consejo Superior de Turismo (Conseturismo), que pidió al Gobierno nacional revisar las relaciones comerciales con la agencia de viajes. "Una medida como esta, solo afecta a los venezolanos y agrava la situación del sector turismo ya en decadencia. Acabamos de cerrar uno de los peores años del sector", indicó el Consejo a través de una misiva, en la que detalló que la aerolínea realizaba 40 viajes semanales desde Caracas, Maracaibo y Valencia, hacia varios destinos internacionales, equivalentes a 5.296 asientos o cupos para pasajeros que ahora no estarán disponibles.
Sumada a la suspensión de Copa, el Ejecutivo liderado por Maduro, cesó sus relaciones comerciales con 22 funcionarios panameños y otras 45 personas jurídicas. Por su parte, Panamá respondió a las medidas, calificadas como "sin sustento", y prohibió los vuelos desde y hacia su territorio provenientes de nueve aerolíneas venezolanas: Aeropostal Alas De Venezuela, S.A., Avior Airlines, Consorcio Venezolano De Industrias Aeronáuticas y Servicios Aéreos, S.A. (Conviasa), Línea Aérea De Servicio Ejecutivo Regional, (Laser), Rutas Aéreas de Venezuela, S.A. (Ravsa), Santa Bárbara Airlines, Turpial Airlines, C.A; dejando a Venezuela más aislada que nunca de otros destinos internacionales.
La crisis en el sector aeroportuario nacional, se ha agravado conforme a la situación país. En diciembre pasado, el presidente ejecutivo de la Asociación de Líneas Aéreas de Venezuela (ALAV), Humberto Figueroa, señaló que desde el año 2013 el servicio desmejoró debido a la caída de la demanda y a la falta de divisas para hacer mantenimiento a los aviones. Para finales de 2017, de 114 aeronaves que conforman la flota venezolana, apenas 35 estaban prestando servicio comercial, dijo el representante de ALAV. Según El Impulso, Figueroa indicó que en el segundo semestre de ese año, ALAV reportó que la frecuencia de vuelos internacionales era de 121, lo que representa una caída de 63% con respecto a 2013, cuando se registraban 352.
La principal razón de este declive, sería la deuda que el Gobierno venezolano guarda con las aerolíneas internacionales, a quienes no les ha permitido repatriar más 3.8 millones de dólares. IATA dijo en octubre pasado que no veía solución a corto plazo y que no creía que Venezuela pagara la deuda, con la que resultan afectadas varias de las aerolíneas adscritas a su asociación. "La situación es difícil. La mayoría de las aerolíneas que forman parte de IATA ya han salido del país, apenas quedan 6 o 7 con frecuencias muy reducida", informó su vicepresidente, Peter Cerdá.
Según EFE, Cerdá detalló que, en cuatro años, Venezuela se aisló casi por completo del resto del mundo en términos aeronáuticos. Desde 2013 hasta finales de 2017, IATA registró una caída en la demanda de pasajeros de 75%. "Si la situación política del país sigue empeorando habrá más aerolíneas que se vayan. No creo que Venezuela se vaya a desconectar totalmente, siempre habrá algún tipo de conectividad, pero el acceso va a ser mucho más difícil de lo que es hoy", alertó el representante de IATA en la región.
Este viernes, el vicepresidente de la Asociación pidió al Ejecutivo reconsiderar la suspensión de Copa Airlines, debido al gran impacto económico que esto generará. De acuerdo con Tal Cual, Cerdá habría enviado una carta al ministro de Transporte, Carlos Osorio, en la que resalta el efecto negativo para el país y para la población suspender las relaciones comerciales con la agencia panameña. Más de 100 mil pasajeros y 250 empleados se verán directamente afectados por la medida, además, se "obstaculizará la comunicación con el resto de los países del mundo, la cual está limitada desde el 2014 por la decisión del 81% de aerolíneas de cesar sus operacione"…
