El presidente de Iberia, Luis Gallego, expuso en el Instituto Tecnológico de Massachussets (MIT, en inglés) en Boston (EE.UU.) los planes de expansión de la compañía, que aspira a convertirse en referente del tráfico aéreo entre Asia y Latinoamérica.
En su intervención ante los alumnos españoles de MBA en Universidades estadounidenses -como el propio MIT o Harvard-, Gallego relató cómo Iberia ha conseguido pasar de unas pérdidas de alrededor de un millón de euros (1,11 millones de dólares) diarios en 2012 (restó 351 millones o 391 millones de dólares ese año) a ganar 437 millones de euros (487 millones de dólares) en 2018.
«La reinvención de Iberia», como se tituló la charla, pasó por un cambio en la posición estratégica de la compañía, hacia unos mejores ingresos pero también unos mejores costes de sus servicios, para lo que era necesario mejorar la propuesta comercial (eliminar rutas poco productivas o desfasadas) o revisar la estructura ineficiente de la compañía.
El objetivo, aseguró Gallego a los estudiantes participantes de esta undécima edición de la Conferencia MBA España, era que Iberia se pareciera «más a Apple que al Ministerio del Aire», por lo anquilosada y desfasada que estaba la compañía cuando asumió el mando en 2012.
Iberia, que en la actualidad opera en 47 países con 135 destinos y una flota de 141 aviones, no solo pasó de un balance en rojo al positivo en sus cuentas, sino que además consiguió cambiar un alto índice de retrasos y problemas operacionales, para llegar a ser la compañía más puntual del mundo en 2016 y 2017.
«Era un objetivo, no creía que lo íbamos a conseguir, para ser sinceros» del todo, apuntó durante su charla, de tono distendido.
Iberia redujo a la mitad sus pérdidas en 2013 y reportó beneficios de nuevo en 2014, que fueron de 50 millones de euros (55,7 millones de dólares).
Uno de los factores diferenciales de la compañía, señaló Gallego, es la pertenencia al grupo británico IAG que, entre otras, controla British Airways y Vueling.
IAG jugó un papel fundamental en los peores momentos de la compañía cuando, por ejemplo, ante el encargo de nuevos modelos Airbus 350-900 para renovar la flota, el conglomerado aportó fortaleza necesaria para avalar la compra.
Si bien esto supuso «tener detrás al primo de Zumosol», en palabras de Gallego, IAG se beneficia también de la situación estratégica de Iberia en Latinoamérica, donde la aerolínea española cuenta con 18 destinos.
Además, hablando de compañías actuales que se encuentran inmersas en guerras de precios para hacerse con cuota de mercado, Gallego apuntó al alza de los precios del petróleo que hace peligrosa esta práctica y que habría perjudicado seriamente a la Iberia de 2012.
«Ahora que está otra vez subiendo el combustible, estaríamos cayendo. Si a nosotros nos hubiera pillado la situación hoy, seríamos de las que están cayendo», explicó a los asistentes…