El negocio aéreo es, sin duda, uno de los más regulados del mundo.
Para hacer un pequeño inventario por categoría"¦ una línea aérea internacional debe hacer frente a Convenios internacionales, multilaterales y bilaterales (Convenio de Chicago, Convenio Ciudad del Cabo, Convenio de Montreal, etc"¦); Normativa plurinacional- en casos como la Unión Europea (Cielos Abiertos, derechos de consumidores, etc"¦); Normativa Estatal (en algunas naciones diferentes por cada Estado que la compone- seguridad, navegación aérea, etc"¦); Normativa de Derecho Internacional (la que regula la naturaleza internacional de su actividad- competencia judicial en caso de conflictos, etc..); así como toda la Normativa que aplica al resto de entes económicos: normativa mercantil, fiscal, laboral, etc"¦es decir, ¡no es poco!
Como se puede observar la regulación aplicable a las aerolíneas es uno de los principales riesgos que afectan su negocio y, por tanto, es el foco de una especial atención ya que la adaptación a las crecientes normativas que existen puede modificar sustancialmente el modelo de negocio en su ámbito de operación.
Si hablamos de los retos y cómo adaptarse en Latinoamérica a estos cambios regulatorios, la primera sugerencia es mirar al Viejo Continente, que dentro de la industria representa uno de los territorios más regulados del planeta, más intervencionista por parte de los Estados y lo que es más importante, que sirve de base para que luego otras regiones como Latinoamérica, tomen estas regulaciones como mejores prácticas a implementar.
Las principales regulaciones que ya se están implantando a nivel mundial y que seguramente modificaran el modelo de negocio de la industria son las correspondientes a: Regulaciones de Tráfico Aéreo, Regulaciones de Derechos de Pasajeros y Regulaciones Medioambientales.
La Regulación del Tráfico Aéreo, es una de las mejores prácticas que ha conseguido importantes eficiencias a las aerolíneas y han contribuido de forma relevante a la "universalización" del transporte aéreo en Europa, gracias al impacto que estas eficiencias han tenido en el precio de los boletos aéreos.
La Regulación relativa a los Derechos de Pasajeros, al nivel que está implantada en la Unión Europea, puede modificar muy significativamente el modelo de negocio en Latinoamérica, con el perverso efecto de encarecimiento de los boletos en una región que de por sí, tiene un nivel muy elevado de precios.
La Regulación Medioambiental es otro de los principales retos de la industria. Ya las principales aerolíneas de la región se han anticipado a la necesidad global de reducir las emisiones, realizando importantes inversiones aeronaves de nueva generación. Aun así, esta regulación es un riesgo muy relevante para las aerolíneas si, al igual que ocurre en Europa, los Estados implantan impuestos a la emisión que igualmente reducirían la competitividad regional.
¿Pero qué se está haciendo en nuestra región por este tema?
Al fin comienza a sonar el concepto de cielos abiertos entre algunos países o zonas, lo cual sin duda puede ser un gran avance. Por otra parte, los representantes de aerolíneas, así como la Asociación que las agrupa, IATA, han mencionado en reiteradas ocasiones e insistido a las autoridades para tomar cartas en el asunto con el fin de beneficiar al transporte aéreo en su conjunto y con ello a las economías de cada país y los mismos pasajeros.
Éste tema es de tal relevancia hoy también para la industria aérea en Latinoamérica que será uno de los focos de la 10 edición de la conferencia Wings of Change 2018, el 4 y 5 de abril en Santiago de Chile, donde se reúnen cada dos años las principales autoridades y ejecutivos de la industria aérea. En el evento habrá un completo panel titulado: "Cómo abordar desafíos regulatorios complejos para adaptarse al crecimiento" en el que participarán entre otros, el Director Ejecutivo de ALTA (Latin American and Caribbean Air Transport Association), Luís Felipe De Oliveira junto al Director de la Oficina del Hemisferio Occidental de la FAA (Federal Aviation Administration), Christopher Barks. Este panel servirá para desde la perspectiva Reguladora Norteamericana, se conozcan las posibilidades de avanzar en el modelo de apertura y coordinación del espacio aéreo en Latinoamérica.
Como conclusión de este artículo, yo realizaría la siguiente reflexión: por un lado, Latinoamérica no es Europa ni Estados Unidos, donde la eficiencia operativa de la industria aérea gracias a sus infraestructuras hace más flexible la introducción de normativa sin suponer una pérdida de competitividad y, por otro lado, es necesario avanzar en normativa de Cielos Abiertos en la región, para que las eficiencias que esta normativa genera, puedan servir para el desarrollo de la industria en la región que supondrá una palanca para su desarrollo económico. Todos estos aspectos se verán tratados durante Wings of Change tanto desde la óptica privada de aerolíneas y aeropuertos, como desde la óptica de los reguladores y administraciones gestoras de la industria en la región.