"Detectamos fehacientemente más de 500 despidos y creemos que va a haber más de 3.000 puestos de trabajo perdidos si esto no remonta, si no hay un cambio en la política económica en los próximos seis mese", afirmó Walter Rodríguez, secretario de la Asociación Argentina de Agencias de Viajes (AAAVyT) tras el cierre del Congreso que los reunió en Santiago del Estero.
En la presentación de Comite Ejecutivo de AAAVyT los socios plantearon sus inquietudes ante la dirigencia, surgiendo como principal tema de conflicto la Resolución 3550 y los problemas que ha significado para el turismo emisivo de Argentina.
"Por supuesto que no estamos de acuerdo con el 35% y que entendemos que no es la forma de corregir una variable que nació en función de una diferencia cambiaria", explicó el presidente de AAAVyT, Fabricio Di Giambattista, agregando que "para nosotros no sirve como medida para fomentar el turismo nacional" y por esa razón "fuimos a pedir (ante el Ministerio de Economía) que se revise esta resolución al entender que no es adecuada".
En ese sentido, Walter Rodriguez resaltó que durante el encuentro técnico que mantuvieron con representantes de la cartera económica del gobierno nacional, "el argumento más sólido que llevamos para que se revierta el recargo es el de los despidos, porque la situación es preocupante".
"En este momento hay más agencias que cierran que las que abren", lamentó el secretario de la Asociación y recordó que ya se han contabilizado 500 despidos pero creen que esa cifra puede llegar a multiplicarse por seis si no se revierte el recargo que se cobra para los turistas que deciden viajar al exterior: "estos despidos van a seguir mientras no cambie el afuera, es un tema coyuntural".
Ante esta situación, el ex presidente de AAAVyT, Tomas Ryan, pidió a la dirigencia actual "pelearla más, salir a decir que hay 500 y que va a haber 3.000 despidos, porque así creo que la AFIP nos va a entender", para concluir pidiendo «que las soluciones no lleguen cuando ya estemos todos fundido".
Las agencias de viajes argentinas emisivas exigen que el recargo del 35%, que también es aplicable a la compra de dólares para turismo, se retrotraiga al 20% vigente antes del 3 de diciembre de 2013, porque de esa fecha a esta parte las ventas se contrajeron un 50%.