Honduras, Belice y Panamá, entre otros destinos de Centroamérica, han ganado reputación internacional como paraísos para los submarinistas. En la región se pueden vivir aventuras únicas, desde una exploración en el Blue Hole hasta nadar junto a un tiburón ballena.
Igualmente, las opciones van desde bucear entre barcos hundidos a hacerlo en un lago de origen volcánico.
La larga lista de posibilidades para el buceo, tanto en la costa del Caribe como en la del Pacífico, se complementa con una rica oferta en turismo arqueológico, colonial, de naturaleza y aventura, sol y playa, y bienestar.
Semanas atrás, a inicios de marzo, tuvo lugar en Madrid la sexta edición de la Feria del Buceo Dive Travel Show 2014), a la cual acudieron representantes del Instituto Hondureño de Turismo (IHT) para poner en valor su oferta en este ámbito.
En ese ámbito, el director del IHT, Emilio Silvestre, hizo hincapié en la isla de Utila, una de las Islas de la Bahía, en el litoral caribeño: un paraíso natural para los amantes del buceo, ya que cuenta con un paisaje acuático de ensueño, peces de colores y arrecifes coralinos, además de ser de los pocos lugares del mundo donde es posible bañarse junto al tiburón ballena.
La mejor época para vivir la experiencia del tiburón ballena, ya sea en Honduras, Belice o Panamá, es de marzo a junio en las noches de luna llena.
El Salvador, entretanto, ha puesto en marcha el Corredor de Arqueología Subacuática, una ruta que discurre entre cinco barcos que naufragaron y que hoy funcionan como zonas de refugio, alimento y reproducción para numerosas especies marinas.
La costa de Costa Rica en el Pacífico está llena de rica diversidad biomarina. En las inmersiones en esta parte del país se puede observar tortugas marinas, variedad de tiburones, delfines o ballenas jorobadas. La mejor época para hacerlo corre de marzo a noviembre.
En San Juan del Sur, en Nicaragua, también se pueden observar ballenas en su ruta migratoria hacia el sur en el mes de diciembre.
Guatemala completa la oferta submarina en la región con la posibilidad de zambullirse en sus lagos de origen volcánico, ya sea en Atitlán, uno de los lagos más bellos del mundo, o en la laguna de Ayarza.
Pequeños paraísos en el Caribe
La abundancia de islas, la transparencia de las aguas y la exuberancia de las formaciones coralinas hacen del Caribe uno de los destinos que más opciones y sitios únicos ofrecen para el buceo a escala global, desde el Blue Hole en Belice y las islas del litoral mexicano hasta pequeñas y aisladas ensenadas en Islas VÃrgenes o Guadalupe.
Uno de los destinos más peculiares y sugerentes que invitan a sumergirse en las maravillosas aguas caribeñas es Buck Island, ubicado al norte de las Islas VÃrgenes.
Un sitio paradisíaco, repleto de paisajes bellos, playas de arena fina y vegetación exuberante, con diferentes escenarios acuáticos para realizar buceo y explorar las profundidades del mar, bajo el impresionante marco de animales marinos.
Otro de los destinos preferidos para la práctica del buceo es Bonaire, ideal para los que planean su primera experiencia submarina. Su enorme variedad de peces exóticos y corales hacen de esta isla un sitio espectacular donde quedarse.
La abundancia de vida marina es sorprendente. Más de 470 especies se encuentran en las aguas de Bonaire: peces sapo, tortugas marinas o águilas del mar"¦ y para los especialmente afortunados, es posible nadar con delfines, mantas rayas o incluso con tiburón ballenas.
Con un conjunto de 700 islas, con hoyos azules, variedad de animales y excelente visibilidad, Bahamas ofrece una experiencia única de buceo, que es posible practicar en todos los niveles…