La falta de promoción de los servicios de salud que ofrece El Salvador, así como la seguridad ciudadana, los precios de los vuelos aéreos y una nula coordinación de las iniciativas privadas son solo parte de los obstáculos que el país tiene para crecer en el rubro del turismo médico, una práctica que ya está generando millones de divisas en el resto del mundo.
Aunque en la región El Salvador es de los países con mayor afluencia de visitantes que solicitan servicios médicos "”55 % según datos de la Cepal de 2011"”, un diagnóstico elaborado por el doctor Mario Cruz señala que el crecimiento de esta industria aún es leve y no está aprovechando al máximo sus productos.
Según cifras del Ministerio de Turismo, el año pasado el país facturó más de $15 millones por tratamientos médicos y se atendió a 17,693 personas (la mayoría de ellos salvadoreños residentes en el exterior), que prefirieron los servicios médicos en su país natal a los de cualquier otro.
En Costa Rica esta industria genera no menos de $298 millones y su proyección es crecer a $900 millones en el 2014, un dato que demuestra el potencial que se podría lograr en el país.
Las condiciones están a la vista. Según el estudio, uno de los mayores atractivos de los servicios médicos es el precio. Una artoplastia de cadera (reemplazo de la articulación de la cadera) puede llegar a costar hasta $75,000 en Estados Unidos, mientras que en El Salvador, esa misma operación tiene un costo promedio de $12,500.
Una mastectomía (remoción de una o las dos mamas) puede costar $40 mil sin seguro, o $16 mil con seguro en Estados Unidos, mientras que en el país puede costar $7,500.
Además en el país hay hospitales privados que tienen tratamientos médicos de alta especialización mundial, como la medicina regenerativa para los pulmones y para el corazón, la tomoterapia para enfrentar el cáncer y la neuroestimulación para tratar el párkinson, que son tratamientos innovadores.
Pero diversos factores siguen impidiendo que el negocio crezca con rapidez. «Hay oportunidades para crecer», dijo el consultor Mario Cruz.
Según el diagnóstico, el país no está aprovechando el gran nicho de mercado de los extranjeros. «Estamos recibiendo puros compatriotas», agregó el médico.
También está el problema de la descoordinación. Muchos médicos ya trabajan en turismo médico desde hace más de siete años, pero el tema no ha sido acogido como de interés nacional y por tanto no hay objetivos comunes ni estrategias claras para aumentar esta industria.
El doctor Enrique Arias, especialista en cirugía para obesidad, dijo que muchos de los médicos salvadoreños están atrayendo a extranjeros a sus consultorios desde hace más de siete años, pero por sus propios medios y sin apoyo de nadie. «Hay muchas iniciativas, pero todas son aisladas», dijo.
Ha sido hasta este año que los mismos médicos han decidido crear una asociación en la que se puedan discutir sus problemas y sus ventajas.
Otros doctores, presentes en la presentación oficial del documento ayer, en el Ministerio de Turismo, también señalaron que hay mucha burocracia para importar los insumos médicos. Además señalaron que de nada serviría que los servicios fueran baratos si el costo de los boletos aéreos a El Salvador es elevado.
Arias dijo que lo ideal sería que el cliente que viene al país y contrata servicios de odontología también tuviera más información sobre otros tratamientos especializados en otras áreas. Sugirió, además, que haya más promoción en el exterior y que sea el Gobierno quien lidere y coordine estas iniciativas.
Poco presupuesto
En respuesta a las diversas realidades, el ministro de Turismo, José Napoleón Duarte, dijo que con un presupuesto de $10 millones para toda la cartera de Estado es difícil posicionar al país como se quisiera, pero declaró que están haciendo esfuerzos para potenciar el rubro y lograr una mayor atracción de turistas.
«Hay una clara oportunidad de negocio en este rubro…, pero los productos no se cocinan de la noche a la mañana», dijo.
El funcionario aseguró que por ahora se han centrado en el turismo base (zonas turísticas del país) y que después viene el turismo más especializado, como este. Su gestión terminará en 12 meses.
El doctor Rafael Lorenzana pidió expresamente al ministro Duarte que el Gobierno lidere una iniciativa de turismo médico y que lo establezcan por decreto, como lo han hecho en otros países donde esta industria es de interés nacional.
