España batió en 2017 su récord de turismo por quinto año consecutivo al recibir 81,4 millones de visitantes extranjeros, 6,2 millones más que el año anterior, según datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
El dato consolida al país como potencia turística mundial con un crecimiento del 8,6 por ciento en comparación con 2016, cuando ya se había alcanzado otro récord, y constata el «boom» turístico como uno de los pilares de la recuperación que vive la cuarta economía del euro.
El primer país de origen volvió a ser Reino Unido, con 19 millones de turistas, seguido por Alemania (11,7 millones) y Francia (11,2 millones). También hubo un significativo aumento de visitantes procedentes de países nórdicos (5,85 millones). Cataluña volvió a ser el primer destino de los turistas extranjeros con 19 millones de visitas, si bien el dato fue contrayéndose en el tramo final del año, coincidiendo con la crisis independentista en la región, y se desplomó casi un 14 por ciento interanual en diciembre.
Esa caída explica que España sufriera en diciembre un retroceso del 0,22 por ciento en comparación con el mismo mes del año anterior, el primer descenso interanual desde 2013. Los otros dos destinos preferidos de los extranjeros fueron Canarias e Islas Baleares…
