Luego de años de gestiones, la Unesco aprobó este domingo la inscripción del antiguo frigorÃfico Anglo, en la ciudad uruguaya de Fray Bentos, como "Paisaje cultural industrial". Se integra así a la lista de sitios Patrimonio de la Humanidad, lo que significa un "desafío de gestión", según definió el subsecretario de Turismo, Benjamín Liberoff.
El reconocimiento del «Paisaje cultural industrial» de la ciudad uruguaya de Fray Bentos, en el departamento de Río Negro, como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco es «un desafío y una oportunidad», dijo el subsecretario de Turismo, Benjamín Liberoff.
«Para Uruguay y en particular para la zona significa un enorme desafío de gestión para promover su valor porque implica generar otros atractivos que permitan potenciarlo sin afectar el área protegida», indicó el jerarca a la agencia EFE.
La Unesco aprobó la inscripción del sitio uruguayo en su Lista de Patrimonio Mundial durante la 39ª reunión de su Comité especializado que se celebra en la ciudad alemana de Bonn desde finales del mes pasado.
El punto central del «Paisaje cultural industrial» de Fray Bentos, en el departamento de Río Negro, es el FrigorÃfico Anglo, fundado como Liebig’s en 1865 con capitales ingleses, irlandeses, alemanes y uruguayos, que pronto se convirtió en una de las principales fábricas cárnicas de Sudamérica y en fuente de alimentos para Europa. Ver: Uruguay confía en que Unesco designe Patrimonio Mundial al FrigorÃfico Anglo.
Allí funciona el Museo de la Revolución Industrial y se hacen recorridos guiados por las vastas instalaciones que marcaron una época y forjaron en Fray Bentos una sociedad cosmopolita en la que convivieron inmigrantes de más de 55 nacionalidades que trabajaban allí.
Este sitio ilustra, según la Unesco, «todas las fases de la cadena alimentaria cárnica», desde el abastecimiento hasta la expedición, pasando por la transformación, el enlatado y el envasado.
Su entorno abarca 275 hectáreas que incluyen el imponente y añejo frigorÃfico Liebig’s-Anglo, sin actividad desde hace décadas, así como sus instalaciones industriales, los muelles sobre el río Uruguay, el matadero y las residencias de los jefes y subalternos.
El lugar y todo su contenido «permiten aprehender la totalidad del proceso de una producción de carne que tuvo una importancia mundial», subrayó el informe de ese organismo de Naciones Unidas.
Tras la difusión de la noticia, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Uruguay emitió un comunicado para expresar su «satisfacción» y recordar que se trata de la segunda localidad uruguaya en recibir el tÃtulo, ya que en 1995 el barrio histórico de Colonia del Sacramento, también fue reconocido por la Unesco. El país prepara una celebración del 20 aniversario de esta nominación para diciembre de este año.
«La mencionada distinción, producto del esfuerzo de varios años de trabajo interdisciplinario, que se inicia en el año 2009, reconoce, además del valor universal excepcional del sitio, la rigurosa preparación del expediente de candidatura por parte del equipo técnico de nuestro país», expresaron desde la Cancillería en el texto…