LATAM Airlines Ecuador reanudó oficialmente las operaciones comerciales de pasajeros, luego de la restricción de operaciones en el país debido a la emergencia sanitaria por el COVID-19.
Las primeras operaciones corresponden a las rutas entre Quito-Guayaquil, con cuatro frecuencias semanales; y Quito-Cuenca, con tres frecuencias semanales. Todas ellas, bajo estrictos protocolos de seguridad e higiene de cara a sus pasajeros y tripulación.
Asimismo, la filial ecuatoriana ofrece a sus clientes una nueva experiencia digital, con una compra más sencilla e intuitiva, a través de www.latamairlines.com/ecuador.
Medidas de seguridad e higiene adicionales
LATAM ha fortalecido sus protocolos de seguridad e higiene; todo ello, en línea con las recomendaciones de los organismos internacionales referentes en la materia, como la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), y acorde a las disposiciones de las autoridades sanitarias de los países en donde opera.
Es así como fueron implementadas varias medidas especiales en esta nueva forma de volar, entre ellas: uso obligatorio de mascarillas por pasajeros y tripulación, medidas de distanciamiento previo y posterior al abordaje, alcohol gel disponible en aviones, interacción reducida entre tripulación y pasajeros, además de la desinfección de zonas de contacto (manillas, reposamanos y baños) en todas las fases del viaje.
Dentro de este “sistema de protección” destaca los filtros HEPA a bordo, que garantizan la captura del 99.9% de partículas, gérmenes y virus en un proceso de filtración de aire de circulación vertical que se realiza cada tres minutos.
Mayor flexibilidad para su viaje
Adicionalmente, los pasajeros de LATAM cuentan con mayor flexibilidad para comprar pasajes y programar sus viajes.
Hasta el 31 de Julio de 2020, los pasajeros podrán reprogramar voluntariamente sus pasajes en latam.com antes de la salida de su vuelo. El primer cambio será sin penalidad ni diferencia tarifaria (mismo destino, sujeto a disponibilidad de cabina y vigencia del ticket) y podrán modificar el destino pagando la diferencia tarifaria si existiera.
Si el pasajero no tiene claridad respecto a la fecha en que quiere viajar, podrá dejar abierto su pasaje por 12 meses, siempre y cuando avise a la aerolínea a través de su sitio web, con al menos 7 días de anticipación.
En el caso que un vuelo sea cancelado o reprogramado, los pasajeros podrán reprogramar sus pasajes sin penalidad o diferencia tarifaria (sujeto a la disponibilidad de cabina, mismo destino y vigencia del ticket). En caso de querer cambiar el destino aplicará diferencia tarifaria si existiera.