Aunque la industria de la aviación sufrió un duro golpe en 2020 y sufrió sus mayores pérdidas hasta la fecha, Turkish Airlines se destacó con un desempeño comercial relativamente bueno. De acuerdo al Centro de Aviación – CAPA, (miembro de Aviation Week Network), Turkish Airlines se estableció como la flota más activa de Europa durante la pandemia y una de las cinco principales aerolíneas del mundo. Este logro fue posible gracias a una serie de pasos ágiles para sostener la liquidez, mantener los costos en un nivel manejable y adaptarse a la “nueva normalidad”.
Turkish Airlines cerró exitosamente el año fiscal 2020 con ingresos de 6.7 billones de dólares, lo que representa el 50% del nivel del año anterior, con una pérdida neta solo de 836 millones de dólares. Durante estos tiempos de incertidumbre, la aerolínea también pudo mantener su sólida red de rutas. Según Eurocontrol, en abril de 2021, Turkish Airlines operó un promedio de 685 vuelos por día – casi el doble de su competidor más cercano en Europa, Lufthansa. En 2020, Turkish Airlines transportó a 28 millones de pasajeros, con un impresionante factor de carga del 71%. Actualmente, la aerolínea brinda servicio a 179 destinos internacionales, con 16 vuelos entre distintos países y 58 vuelos intercontinentales. El nuevo aeropuerto de Estambul también se mantuvo en la cima: incluso con una pérdida de tráfico del 68%, sigue siendo el aeropuerto más exitoso de Europa hasta marzo de 2021, con 616 vuelos de salida y llegada.
Este éxito se debe a las actividades de reducción de costos, la reducción de gastos de capital y la gestión activa de la gerencia. De hecho, Turkish Airlines logró tal desempeño sin depender de ninguna inyección de efectivo gubernamental. Más aún, los acuerdos con Boeing y Airbus sobre el crecimiento de la flota, reducirán a futuro las necesidades de financiación de aviones de Turkish Airlines, en alrededor de 7.000 millones de dólares en los próximos años.
“Nuestro éxito como la aerolínea de bandera con mejor desempeño en Europa no es una coincidencia. Además de las múltiples medidas que tomamos, este éxito se lo debemos a nuestro dedicado personal. Mientras otras aerolíneas enfrentaron despidos, nosotros no nos separamos de ninguno de nuestros colegas durante este proceso. En cambio, el personal aceptó recortes salariales de hasta el 50% en una escala proporcional basada en roles y responsabilidades. El excepcional sentido de unidad dentro de nuestro personal es lo que distingue a Turkish Airlines: juntos como familia, decidimos que ningún miembro de la familia de Turkish Airlines se quedaría atrás durante esta crisis”, dice el presidente de la junta directiva de Turkish Airlines y el Comité Ejecutivo, M. İlker Aycı.
Turkish Airlines también convirtió a la pandemia en una oportunidad para aumentar sus operaciones de carga, reconfigurando 50 de sus aviones de pasajeros para aumentar la capacidad de cargamento de su flota. Turkish Cargo logró convertirse en una de las cinco principales compañías de carga aérea del mundo y la sexta compañía de carga más grande. La compañía aumentó su participación de mercado en los ingresos totales de carga global del 0,6% en 2009 al 4,7% en 2020. Hasta febrero de 2021, Turkish Cargo realiza uno de cada 20 vuelos de carga en todo el mundo.
Esto permitió a Turkish Cargo entregar 50.000 toneladas de suministros médicos, incluidas más de 45 millones de dosis de vacunas COVID-19, a destinos de todo el mundo. Además, se han desarrollado nuevas tecnologías y soluciones innovadoras. Un ejemplo es SmartIST, una de las instalaciones de carga aérea más grandes del mundo, cuya inauguración está programada para este año. Ubicada en el aeropuerto de Estambul, la instalación utiliza tecnología moderna como drones y robots automatizados para procesar y entregar mercancías aún más rápido.