El Aeropuerto de Bilbao cumplió 75 años de servicio, en donde más de 120 millones de viajeros han aterrizado y despegado desde sus instalaciones.
Situado en el valle vizcaíno del Txorierri, en los municipios de Derio, Erandio, Loiu, Sondika y Zamudio, en 1948 comenzaba su andadura junto a Sondika, en uno de los pocos terrenos propicios en aquel momento para desarrollar una infraestructura aeroportuaria en el entorno de Bilbao.
Al día siguiente operó el primer vuelo regular comercial con Madrid, realizado por la entonces Aviaco.
Los primeros años de vida de la infraestructura transcurrieron en crecimiento constante, con la construcción de una terminal, calles de rodaje y las primeras edificaciones para ubicar los servicios básicos que todo aeródromo debía tener en la época.
En 1952, el vuelo a Burdeos puso la primera piedra de los viajes internacionales; en 1964 amplío la pista original, la 10-28, hasta los 2.000 metros, dándole empaque a una infraestructura que en las próximas décadas se antojaría vital para Bizkaia y Euskadi en el ámbito de los servicios y el turismo; años después, en 1967, Iberia empezó a operar en Bilbao.
Al acercarse el cambio de siglo, la liberalización del transporte aéreo con la aparición de nuevas compañías aéreas y la irrupción del modelo low-cost en Europa, trajeron la necesidad de una infraestructura para el siglo XXI, por lo que en 1999 se puso en servicio la actual torre de control.
En el año 2000 llegó el momento de estrenar una nueva terminal, un nuevo aeropuerto en Loiu, con accesos nuevos y más cómodos, mejores servicios para pasajeros y aerolíneas…
