Todas las empresas que ofrecen servicios en los aeropuertos viven en una escalada de recortes de gastos y de plantilla que nadie sabe dónde parará. Lo único que se venía librando de esta ‘poda’ eran los bares, las tiendas y otros comercios. Pero también eso está amenazado.
En Bélgica, dos empresas, Largardère y Atos han trabajado conjuntamente para terminar el diseño de un punto de venta sin impuestos (duty free) totalmente automatizado. En modo de prueba, el comercio ya abrió al público, que este sí existe.
Con un gran parecido a las pocas tiendas Amazon que hay en el mundo, el viajero que entra ha de escanear su tarjeta de embarque y desde ese momento puede coger todos los productos que desee. Con una tecnología sofisticada, todo se carga en la tarjeta (de débito o de crédito) en el momento de abandonar la tienda.
La tienda se llama «Quick N’Easy» (Rápido y fácil) y ya está operativa, vendiendo cervezas y chocolates…