Menos de un minuto. Eso fue lo que tardó en desaparecer la pista de aterrizaje del aeropuerto de Jordania cuando, el domingo pasado, lo cubrió una tremenda tormenta de arena.
El fenómeno, que también afectó a distintos puntos de la capital, Amán, generó que los aviones que estaban en el Aeropuerto Internacional Queen Alia tuvieran que quedarse en tierra y aquellos que estaban acercándose fueran desviados durante varios minutos…