El vuelo de Volaris 631 con destino a Guadalajara quedó varado este martes en Cancún debido a que un joven saltó poco antes de despegar.
El pasajero, identificado en el diario Quequi como Gabriel Varela, de alrededor de 20 años; sufre de bipolaridad, por lo que días antes no había podido abordar su vuelo en la misma aerolínea.
Fue su madre quien acudió a Cancún para regresarlo a su lugar de origen en Jalisco, sin embargo en esta ocasión el joven logró tomar el altavoz de la aeronave y gritar que habría una explosión.
Momentos después, narró un turista al diario local, llegó hasta la compuerta y la abrió, activando la escalera de emergencia por donde descendió de manera brusca.
‘El pasajero sí abordó, su mamá lo llevaba, sabíamos que tenía alguna enfermedad y se sabía que tuvo una crisis’, confirmó vía teléfonica a UN1ÓN Eduardo Rivadeneyra, vocero del Aeropuerto Internacional de Cancún; administrado por ASUR (Aeropuertos del Sureste).
El encargado de relaciones públicas evitó dar detalles de lo que pasó dentro de la aeronave, Airbus A320, pues eso corresponde a la aerolínea.
Aceptó que sí se registró un retraso en la pista, luego de las 17:15 -cuando estaba programado el despegue de Volaris-, pero esto no afectó el resto de las operaciones.
De acuerdo al testigo entrevistado por Quequi, el hombre bipolar cambió primero de lugar, para sentarse en la parte posterior del…