La nueva edición de la Memoria de Sostenibilidad refleja, una vez más, el fuerte compromiso del Grupo Lufthansa con los diferentes aspectos de la responsabilidad corporativa.
Al respecto, Christoph Franz, CEO de Deutsche Lufthansa AG, ha comentado: «La gestión responsable de las personas y el medio ambiente forma parte de la filosofía de la compañía y es un factor de éxito fundamental para el Grupo Lufthansa. La sostenibilidad económica está estrechamente relacionada con la responsabilidad ecológica y social. De este modo, las inversiones realizadas en la mejora de la eficiencia del combustible fortalecen nuestro balance económico y, al mismo tiempo, contribuyen a la mejora en el equilibrio medioambiental. Ecología y economía van de la mano».
Con respecto a la eficiencia del combustible, la armonía entre los objetivos ecológicos y económicos es particularmente notable. Una vez más, en 2012, el Grupo Lufthansa ha registrado un record de eficiencia en el consumo de queroseno. Las líneas aéreas de pasajeros del Grupo emplearon el año pasado un promedio de 4,06 litros por pasajero y 100 kilómetros, lo que supone casi un 3% menos que el año anterior. Con un incremento del tráfico de un 0,2% respecto al año previo (en toneladas transportadas por kilómetro), el Grupo utilizó 144.745 toneladas, es decir, un 1,6% menos de combustible que en el año anterior y, en consecuencia, emitió más de 455.000 toneladas menos de CO2.
Un elemento clave en el ámbito de la responsabilidad sobre el clima y el medio ambiente es la inversión en aviones más silenciosos y eficientes. Con el actual programa de renovación de la flota, el mayor en la historia del Grupo Lufthansa, la compañía está haciendo un claro avance con respecto a la reducción de las emisiones y el ruido.
En los últimos años ya se han introducido nuevos modelos de aeronaves de bajo consumo en las aerolíneas del Grupo, como el Airbus A380 o, más recientemente, el Boeing 747-8. A finales de 2013, Lufthansa Cargo recibirá los primeros dos aviones de carga Boeing 777F, altamente eficientes. También la compra aprobada por el Consejo de Administración en marzo de 108 nuevos aviones representa un importante paso hacia adelante para el medio ambiente y para las emisiones de ruido, que afectan a las personas que viven en las inmediaciones del aeropuerto. Los Boeing 777-300, Airbus A320ceo y A320/A321neo, cuentan con tecnología de última generación. Hasta finales de 2025, un total de 236 aviones se encontrarán en la lista de pedidos, con un valor de 22.000 millones de euros a precio de catálogo.
Además de la inversión en aviones modernos con bajas emisiones de ruido, Lufthansa trabaja constantemente en el desarrollo de medidas de reducción del nivel de ruido innovadoras junto con otros miembros de la industria, las autoridades públicas, las universidades y la investigación. Entre estas medidas se incluyen, por ejemplo, las modificaciones a los aviones existentes y el uso de procedimientos de operaciones de vuelo de reducción de ruido.
En relación al rodaje y arrastre de aeronaves en tierra y el funcionamiento de otros medios de transporte en el aeropuerto con base en tierra, la atención se centra en operaciones ambientalmente inocuas y de ahorro de costes. Por lo tanto, en el futuro, los aviones ya no accederán a la pista de aterrizaje, a su posición de estacionamiento en la terminal o al hangar con sus motores a reacción, sino con la ayuda de tractores de propulsión eléctrica o con un motor eléctrico integrado en la aeronave. Las pruebas correspondientes ya se han iniciado.
Con la mirada puesta en la sostenibilidad económica, en la primavera de 2012 el Grupo Lufthansa puso en marcha el programa corporativo «SCORE – Change for Success». Con la ayuda de SCORE se prevé mejorar el resultado operativo en 2.300 millones de euros en 2015. Mientras tanto, SCORE se compone de más de 2.500 proyectos individuales, de los cuales se han llevado a cabo ya 800.
Incluso en tiempos de grandes cambios, el Grupo Lufthansa es responsable con sus empleados. Como reflejo de una política de personal sostenible y socialmente responsable, la compañía ha establecido el programa COMPASS, que apoya a los empleados y directivos para reorientarles con éxito en sus carreras.
Además, Lufthansa ha puesto en marcha, por ejemplo, numerosas iniciativas destinadas a promover la diversidad dentro del grupo. Por ejemplo, para ocupar puestos de dirección, se está prestando cada vez más atención a los aspectos de la diversidad.
El objetivo es, entre otras cosas, el de aumentar la proporción de mujeres en puestos directivos en un 30% para el año 2020 en comparación con 2010. Para Alemania, esto se corresponde con una cuota del 20,2% en toda la empresa, valor que fue del 15,5% en 2012. A nivel mundial, esta cuota se situó en el 13,6% en todo el mundo. Con el fin de allanar el camino, se inició el programa de «Track Focus», que centra su atención en los temas de competencia de la red, la personalidad, la autogestión y la planificación de la carrera. A finales de 2012, el Grupo Lufthansa empleaba a 116.957 personas en todo el mundo en 147 países, siendo el 44,7% de ellas mujeres.
El Grupo Lufthansa, una vez más, cumplió con sus responsabilidades sociales de diversas maneras en el año 2012. Apoyó numerosos proyectos en las áreas de bienestar social, la cultura, la educación, el medio ambiente y el deporte. Por ejemplo, como colaborador con atletas con discapacidad, el Grupo también patrocinó el proyecto de la película «GOLD – Du kannst mehr als, du denkst» («GOLD "“ Puedes hacer más de lo que crees»), que cuenta la historia de tres atletas de clase mundial en su camino hacia los Juegos Paralímpicos de Londres.
El compromiso del Grupo Lufthansa en el área de responsabilidad corporativa también fue reconocido de nuevo en 2012 con varios premios, por ejemplo, con la concesión de la «Aerolínea Eco Oro del Año» por la revista especializada Air Transport World y el primer lugar en la categoría «Medio ambiente» en los «Premios Airline Strategy» de la revista especializada Airline Business.