Luis Gallego, consejero delegado de International Airlines Group (IAG), ha indicado que trabajan con la hipótesis de que todas las aerolíneas del grupo volverán al beneficio este año, aunque con cautela por la incertidumbre que genera la situación actual, en medio del conflicto bélico en Ucrania y la amenaza de la recesión.
La liquidez del grupo, integrado por British Airways, Iberia, Vueling, Aer Lingus y Level, «está en máximos históricos», por lo que en estos momentos descartan una ampliación de capital, aunque «si en algún momento, por crecimiento, tiene sentido, nos lo podríamos plantear», ha dicho este miércoles en un encuentro informativo del ciclo Ágora del periódico elEconomista.
Ha indicado, asimismo, que lo que les importa a las aerolíneas es el ingreso unitario (ingreso por asiento y kilómetros), que es una combinación de dos cosas: el factor de ocupación del avión y el ingreso medio, ha matizado.
Durante este verano, el ingreso medio está siendo superior al que había en 2019 y Gallego confía en que va a seguir así en el futuro, aunque «hay que tener en cuenta todos los vientos de cara que tenemos», ha añadido.
El reto es reparar el balance de la compañía, pagar la deuda -el primer pico toca en 2026- e invertir en nuevos aviones -este año alrededor de 3,9 billones de euros fundamentalmente en nueva flota-, ha recalcado.
«Creemos que lo que tenemos que hacer ahora es invertir en el futuro», ha detallado. En cuanto a Air Europa, espera que se pueda hacer la operación de compra. «Ahora estamos en proceso de hablar con la compañía».
Precio de los billetes
Por otro lado, Luis Gallego ha indicado que no cree que, en un futuro a corto plazo, los billetes sean más baratos. Es difícil que en el entorno actual, de costes más altos, los precios se vayan a reducir, porque «no podríamos volver a los márgenes, pagar la deuda e invertir en aviones y en nuestros empleados», ha explicado.
Para las aerolíneas de un grupo como IAG el combustible es un cuarto de sus costes y, a pesar de que se puede tener coberturas, al final, el precio va a depender de cómo está el mercado y de la situación en Ucrania, entre otros factores, ha señalado.
Los costes laborales son otro cuarto y, tras todo el sufrimiento de la pandemia, hay que llegar a acuerdos con los empleados «que nos permitan seguir invirtiendo en el grupo y en nuestra gente».
La compañía va a tener mayores costes relacionados con la sostenibilidad. «Todos queremos un planeta sostenible y una aviación sostenible, pero todo tiene un coste que, al final, se traduce en el precio de los billetes», ha subrayado Luis Gallego…
