Este año, la aerolínea holandesa KLM cumplió un siglo de operación. El vicepresidente ejecutivo de Carga y miembro de la junta directiva de la aerolínea, Marcel de Nooijer, estuvo en el país para extender esta celebración y fortalecer alianzas comerciales con Colombia, la sede regional más importante de la aerolínea desde el punto de vista de los pasajeros y de carga.
En una industria tan competitiva como la de las aerolíneas, ¿qué estrategias ha implementado KLM para mantenerse vigente?
Estos 100 años que celebramos han sido un buen viaje, con muchos cambios. Nos encontramos en buena forma y estamos saludables, pero es importante mantenernos y seguir adelante. Para eso tenemos buenas estrategias.
En primer lugar, nos aseguramos de que estamos centrados en el cliente, de que ofrecemos productos a bordo (naves y servicio) que satisfacen a nuestros clientes.
En segundo lugar, en un mundo que busca conectividad, necesitamos justamente conectar con los aliados y asegurarnos de que tenemos una estrategia correcta que involucra a nuestro equipo.
¿Cuáles estrategias digitales?
En el ADN de KLM, las herramientas tecnológicas fueron acogidas cuando ningún otro jugador de la industria seguía esta estrategia. Hace un par de años tuvimos una situación en Islandia. De repente, no podíamos viajar sobre Europa y teníamos a cientos de nuestros clientes en diferentes países. Era imposible, con las viejas herramientas, estar en contacto con ellos para entregarles soluciones. En ese momento usamos Facebook para contactarnos con ellos.
Las redes son una herramienta muy poderosa para comunicarse e interactuar con los clientes. El resto de la industria está viendo los beneficios de este acercamiento digital. A nosotros nos gusta vernos como un competidor principal, con todas las oportunidades que ofrecemos a través de chat, Instagram, WhatsApp.
¿Qué relación tiene la aerolínea con el mercado colombiano y qué papel juega el país en su panorama global?
Lo bueno de este mercado es la conexión fuerte entre el sector vacacional y el de carga. El hecho de que hayamos agregado hace dos años a Cartagena en nuestros itinerarios es muy importante.
Hemos invertido para aumentar nuestra capacidad en Colombia: aumentamos a seis frecuencias en octubre. Deberíamos aumentar a una conexión diaria el próximo invierno. Estamos satisfechos.
Por otra parte, en Colombia tienen productos hermosos que están siendo desarrollados y deben ser aprovechados por el resto del mundo. Estamos felices porque apoyamos al país, conectando la producción de las flores con el resto del mundo vía Ámsterdam (Holanda). Colombia tiene un gran futuro, y nosotros queremos hacer parte.
¿Qué planes tienen en Colombia?
Abrimos la ruta entre Bogotá y Ámsterdam hace cuatro años y decidimos cambiarla a Bogotá-Cartagena-Ámsterdam. En un principio arrancamos con tres vuelos a la semana. Aumentamos a cinco y, desde el 27 de octubre, tenemos seis vuelos a la semana. Esto será durante el invierno europeo. Luego volveremos a cinco. En un año retomaremos las seis frecuencias, pero esperamos que sea un vuelo diario.
¿Qué novedades tienen en las flotas?
Estamos renovándolas. Tuvimos la llegada del 787 en junio. De hecho, entregamos las nuevas naves 100 días antes de nuestros 100 años. Estas son buenas y efectivas, sustentables en términos de consumo. Esto está alineado con una de nuestras principales estrategias: invitar a aliados y clientes a viajar de manera responsable por el mundo. Solo hay un mundo. Si los perdemos, nadie ganaría…
