Qantas sigue agregando nuevos destinos para su innovador Project Sunrise: la compañía planea ofrecer vuelos de más de 18-21 horas de duración. Para el 2025 la aerolínea de bandera australiana planea unir a Sydney y Londres con el vuelo más largo del mundo con una duración de 21 horas y 10.878 millas, superando el récord actual de Singapore Airlines con su ruta Singapur (SIN) – Newark (EWR).
En una fase inicial, la empresa espera iniciar rutas ultra largas desde Sydney y Melbourne hacia los principales centros financieros mundiales: Nueva York, Londres, París y Frankfurt.
De acuerdo con una entrevista de The Times a Alan Joyce, CEO de Qantas Group, el Proyect Sunrise también planea unir a la costa este australiana con San Pablo y Ciudad del Cabo, también mencionó añadir servicios sin escalas hacia Chicago y Miami en Estados Unidos.
Anteriormente, Qantas había anunciado una ruta entre Brisbane (BNE) y Chicago O’Hare (ORD) en Boeing 787-9 Dreamliner para iniciar en abril en 2020, pero estos planes fueron cancelados como consecuencia de la crisis de la pandemia del COVID-19.
Qantas el líder de los vuelos de ultra larga distancia
Qantas ha sido una aerolínea que siempre ha soñado de conectar a Australia con el mundo de un solo salto, en 1989 la compañía realizó su primer vuelo sin escalas entre Sydney y Londres Heathrow con sus Boeing 747-400.
Para la temporada de verano de 2023, Qantas operará cinco de las 20 rutas más largas a nivel mundial: Perth (PER) – Londres Heathrow (LHR), Sydney (SYD) – Dallas (DFW), Perth (PER) – Roma (FCO), Melbourne (MEL) – Dallas (DFW) y Auckland (AKL) – Nueva York (JFK). La mayoría de todos estos vuelos tienen una duración de más de 17 horas.
Actualmente el Boeing 787-9 Dreamliner es el pilar principal para las misiones de ultra larga distancia: su alta eficiencia y rendimiento ha logrado hacer posible todas estas rutas con márgenes positivos, a diferencia de los antiguos tetrarreactores como los Boeing 747 y Airbus A380.
Cuando Qantas inició sus servicios sin escalas entre Perth (PER) y Londres Heathrow (LHR) en 2018 permitió a los viajeros australianos ahorrarse cuatro horas de viaje con el precio de un boleto 20% superior, antes que realizar alguna conexión a través de Singapur, Hong Kong o Dubai. Además, este servicio se convirtió en la ruta más rentable de toda la red de la compañía, volviendo a operar con ganancias en sus vuelos a Reino Unido, tras una década con números rojos en este sector.
