El Secretario General Interino de la Organización de Turismo del Caribe (CTO) Neil Walters emitió un comunicado donde destacó los logros de 2020 y compartió su visión para el presente año. Compartimos su mensaje a continuación:
Mientras esperamos el Año Nuevo, 2021, es muy oportuno que hagamos una pausa y reflexionemos sobre el año del que nos despedimos.
Ciertamente, 2020 fue un año que destacó muchas de nuestras vulnerabilidades, pero lo que es más importante, nos enseñó muchas lecciones sobre nuestra capacidad de adaptación frente a la crisis; habilidades que estoy seguro que muchos de nosotros ni siquiera sabíamos que existían.
La pandemia de COVID-19 paralizó las economías de varios países, y los efectos más graves se sintieron en las economías pequeñas y específicamente en las que dependen de los viajes y el movimiento de personas. De hecho, estas dos características describen esencialmente a todos los países del Caribe y, en consecuencia, desde un punto de vista económico, el Caribe ha sido una de las regiones más afectadas del mundo.
Afortunadamente, en su mayor parte, como región, hemos podido controlar la propagación del virus dentro de nuestras poblaciones locales. Esto se ha logrado mediante la implementación de mecanismos de control muy estrictos que han variado de un estado a otro, e incluido en la mayoría de los casos, el cierre temporal de las fronteras internacionales.
Para el último trimestre de 2020, la mayoría de los países del Caribe habían reabierto sus fronteras y la gran mayoría de los países reabiertos también habían comenzado a aceptar viajes comerciales y visitantes a sus costas. En todos los casos, este proceso se ha realizado dentro de los parámetros de protocolos diseñados para complementar la infraestructura de salud del país.
Las historias que describen este proceso de control de infecciones y reapertura de fronteras frente a la segunda y tercera ola de propagación viral en nuestros principales mercados emisores, hablan mucho sobre la adaptabilidad de nuestra gente y específicamente sobre el sector de viajes y turismo en el Caribe que no ha tenido otra opción que la de identificar, aprender y adaptarse rápidamente al entorno cambiante que hemos experimentado durante los últimos 12 meses.
Por lo tanto, avanzamos hacia el 2021 armados con un nuevo conjunto de lecciones aprendidas y con la prueba de que el sector turístico del Caribe, junto con su contraparte en salud pública, tiene el poder de colaboración para reiniciar, revitalizar y reconstruir el turismo en el Caribe más fuerte, más resiliente y listo. para afrontar el próximo reto.
Los expertos han indicado que, con base en los resultados de pandemias pasadas en nuestra historia, se puede esperar un período de recuperación de dos años para volver a la «normalidad». Según esa predicción, podemos esperar condiciones ‘normales’ más allá de diciembre de 2021. De hecho, nuestro concepto de ‘normal’ se ve agravado por la opinión de que las medidas que hemos implementado para controlar la propagación del virus pueden permanecer con nosotros por un período indefinido.
Si bien la pandemia ha amenazado al sector turístico del Caribe, también nos ha brindado la oportunidad de evaluar el sector e implementar acciones que han sido difíciles durante los últimos veinte o treinta años de turismo masivo. La pandemia ha identificado un factor común crítico: la necesidad de cambio, la necesidad de pensar fuera de la caja e identificar diferentes formas de hacer las cosas. Desde la caída de la actividad turística en marzo de 2020, todos los responsables de la formulación de políticas de turismo, las organizaciones de gestión de destinos y otras partes interesadas en el turismo han dedicado tiempo a analizar y repensar críticamente la forma en que gestionan el turismo en sus destinos individuales. Esto ha llevado a un espíritu de mayor cooperación y colaboración que era necesaria en el sector pero que ahora se ha demostrado claramente que es fundamental para el futuro del sector y su éxito.
Todo esto también se ha reflejado a nivel regional, donde los actores regionales del turismo, la salud y el gobierno general han colaborado para crear estándares para la reapertura del sector y continúan colaborando ante un cambio regional y extrarregional. medio ambiente.
Durante 2021, los programas de la Organización de Turismo del Caribe (CTO) continuarán el trabajo iniciado en 2020 en investigación, desarrollo de productos, incluido el turismo patrimonial y comunitario, y desarrollo de recursos humanos, incluida una auditoría y capacitación de recursos humanos del sector turístico regional. Además, nuestros esfuerzos de colaboración continuarán para asegurar que el sector del turismo trabaje con otros sectores como el de la salud para mejorar las perspectivas de la región a medida que avanzamos hacia un nuevo paradigma de normalidad.
Nuestros esfuerzos colectivos hasta la fecha han posicionado al Caribe, desde un punto de vista global, en esta pandemia, como una región saludable y segura para viajar. Es una posición que debemos defender, mientras hacemos todo lo posible por mejorar el resto de facetas de la experiencia del visitante.
En el mensaje de Año Nuevo para 2020, nos elogiamos por recuperarnos en 2019, después de los huracanes de 2017 y por superar el promedio mundial de crecimiento del turismo. Si bien esas métricas tradicionales pueden pintar un panorama diferente este año, en el Caribe aún podemos estar satisfechos con nuestros esfuerzos. En esta ocasión nos hemos probado líderes, a través de la colaboración del turismo y la salud pública para crear protocolos para la reapertura del sector…
