En octubre 2018, SKY marca un punto de inflexión en su historia como compañía aérea al incorporar su primer avión nuevo de fábrica. Al cumplirse un año de aquel suceso, la primera línea aérea de bajo costo y tarifas bajas (LCC, por sus siglas en inglés) dispone de 10 Airbus A320neo en servicio permitiéndole, a fecha de hoy, renovar la mitad de su flota.
Actualmente, SKY posee una flota conformada por 20 aviones distribuidos en 10 A319 con capacidad para 156 pasajeros y otros 10 A320neo para 186 pasajeros. Lo anterior, representa un crecimiento en la oferta de asientos de 21,0% y se espera que esta aumente hasta el 80,0% cuando los nuevos aviones alcancen las 21 unidades, según la información indicada hace un año. Hoy, los planes de la compañía contemplan incorporar hasta 24 aviones en 2020, incluyendo los primeros A321neo, con los cuales buscan atender la expansión internacional en curso.
Crecimiento en capacidad por vuelo, ahorros por sobre el 20,0% en el consumo de combustible y reducción de costos, son los principales aportes que realiza la nueva flota. Sin embargo, desde SKY agregan que la modernización en caminada les permitirá convertirse en 2020 en la primera LCC de la región en tener una operación 100% sustentable, es decir con una flota eficiente y amigable con el medio ambiente.
“Las demandas que hoy nos están haciendo los ciudadanos no debemos tomarlas como exigencias ni amenazas, sino más bien como una oportunidad para activarnos y comprometernos con los cambios que hoy están moviendo al mundo”, comenta Holger Paulmann, CEO de SKY. Agrega que además de la modernización de la flota, la compañía está tomando otras medidas a nivel interno que apuntan hacia una operación sustentable.
Actualmente, las líneas aéreas se están viendo desafiadas a buscar modelos de operación más sustentables a medida que incrementan la cantidad de pasajeros transportados. La reacción es natural por la visibilidad que la aviación consigue a medida que se convierte un medio de transporte masivo, acción que puede derivar en críticas injustificadas de distintos sectores que no necesariamente conocen los aportes y/o mitigaciones que la industria realiza para compensar el impacto hacia el medio ambiente.
Para el máximo directivo de SKY, lo anterior representa una oportunidad para fortalecer acciones en la materia al mismo tiempo que se buscan eficiencias para optimizar los negocios. “Las críticas en contra de la industria aeronáutica, más que asustarnos, deberían impulsarnos y comprometernos a hacer mejor las cosas, precisamente para que volar sea una alternativa de transporte real, sustentable y accesible para todos, incluso para aquellos que hoy no lo están haciendo por el impacto en el medio ambiente”, dice Paulmann.
Según datos de la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA), las operaciones aéreas contribuyen con el 2,0% del CO2 a nivel mundial. La aviación es la primera industria en definir un cronograma de mitigación de gases que contribuyen al efecto invernadero con crecimientos neutros de CO2 a partir de 2020 y reducción de emisiones del 50,0% para 2050 sobre la base de 2005…