España ha sido reelegida para formar parte del Consejo de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) durante los próximos tres años en la 41 Asamblea de dicha Organización que se celebra en Montreal (Canadá), y en la que ha participado de manera muy activa la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma), Raquel Sánchez.
En concreto, nuestro país se integra en la Parte II del Consejo, que es el máximo órgano de gobierno de la organización y está formado por 36 Estados, desde donde seguirá trabajando para impulsar la descarbonización y sostenibilidad del sector aéreo, así como la seguridad y la eficiencia en la operativa. La Parte II está conformada por los Estados que más contribuyen a proveer instalaciones y servicios para la navegación aérea civil e internacional.
La presencia de España en el Consejo de la OACI ha sido ininterrumpida desde el año 1951. Esta reelección pone de manifiesto la influencia del sector aéreo español en el mundo y el valor del trabajo de los técnicos españoles en la organización y su contribución a la comunidad internacional de la aviación. Este apoyo conseguido por la aviación civil española, ha tenido como respaldo fundamental la campaña de promoción exterior realizada de forma conjunta por el Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación y del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana.
Durante su presencia en la 41 Asamblea de la OACI, la ministra reiteró el compromiso de España con la Organización y con sus Estados Miembros para promover el desarrollo de una aviación internacional más sostenible, segura, resiliente e inclusiva, que participe activamente en la reducción de las emisiones de gases efecto invernadero.
La ministra incidió en que uno de los retos más importantes que afronta la aviación es la emergencia climática, por lo que ha instado al sector aéreo internacional a posicionarse en la vanguardia de la lucha contra el cambio climático, a adoptar el objetivo de alcanzar unas emisiones netas cero de dióxido de carbono para el año 2050. Reto en el que se puede avanzar, por ejemplo, reduciendo el consumo de fuel de origen fósil con aviones o rutas más eficientes o con el uso de combustibles sostenibles, y compensado las emisiones realizadas…