Las devastadoras consecuencias del Covid-19 en el sector turístico de Nueva York en 2020 eran evidentes para cualquiera que se paseara por los lugares emblemáticos de la ciudad, pero este miércoles las autoridades le han puesto cifra a la debacle: 44 millones menos de turistas y 60.000 millones menos de dólares que en 2019.
El número de visitantes se desplomó un 67 por ciento, de 66,6 millones en 2019 a 22,3 millones en 2020, y los ingresos del sector turístico cayeron en torno al 75 por ciento, de los 80.300 millones de dólares de 2019 a los 20.200 del año pasado, indicó este miércoles en un informe la Oficina del Interventor del estado.
La pandemia puso fin a diez años consecutivos de crecimiento récord del sector turístico de la Gran Manzana.
Pero, además, la crisis económica causada por la pandemia se llevó por delante 89.000 puestos de trabajo de los 283.200 que empleaba directamente este sector, es decir, un 31,4 por ciento.
Los trabajadores de la industria hotelera de la Gran Manzana fueron unos de las que más sufrieron este impacto, ya que un 46 por ciento de ellos fueron despedidos en 2020.
El sector emplea a más de 376.800 personas de manera directa e indirecta, lo que representa cerca del 10 por ciento de los trabajo generados por el sector privado en la ciudad.
Pérdidas para las arcas de la ciudad
La Oficina del Interventor del estado de Nueva York calcula que esta caída ha supuesto unas pérdidas para las arcas de la ciudad de unos 1.200 millones de dólares en impuestos que no se han recaudado.
Una vez planteados los efectos negativos que tuvieron los cierres que se impusieron para frenar la expansión del virus, la oficina avanzó sus previsiones de recuperación y adelantó que no cree que la ciudad pueda recuperar el músculo turístico que tenía en 2019 hasta 2024 o 2025.
Sin embargo, el informe advierte de que «es poco probable que el empleo se recupere totalmente antes de que lo haga el gasto de los turistas».
«En su esfuerzo por reactivar la industria del turismo, la ciudad no puede simplemente depender de las vacunas y la reapertura – que son pasos necesarios – para que la industria regrese, sino que también debe desarrollar una estrategia proactiva que cultive y atraiga a viajeros internacionales y de negocios para restaurar la salud robusta de la industria y regresar a la senda de crecimiento continuo y compartido», agregó…