Meliá Hotels International ha vendido por 64 millones de euros su único hotel en Puerto Rico, el Meliá Coco Beach, según publica El Confidencial. La cadena mallorquina ha completado la venta del hotel en el primer trimestre del año, tras finalizar la reforma tras los daños provocados por los huracanes Irma y María en 2017.
En el informe semestral de la cadena hotelera, Meliá comunicó que se había completado la venta del Melia Coco Beach, en Puerto Rico, aunque faltaba la formalización de la operación. La salida de Meliá de Puerto Rico obedece a su política de desinvertir en “activos no estratégicos, aprovechando el ciclo del mercado”.
“Uno de nuestros objetivos es la desinversión de activos no estratégicos (como este), en línea con nuestro enfoque hacia un modelo de negocio más ‘asset light’ y un crecimiento más basado en los contratos de gestión hotelera”, afirman fuentes de la cadena mallorquina. Gabriel Escarrer, vicepresidente ejecutivo de Meliá, apuesta a fondo por el modelo de gestión, que ya representa el 33% del ebitda del grupo y aspira a ser el 50% a medio-largo plazo, porque es el que ha permitido a Meliá “este crecimiento sustancial” y lo que les convierte en una empresa menos volátil a las crisis económicas, inmobiliarias o de tipos de interés, según explicó el ejecutivo mallorquín en el informe semestral presentado en junio.
Hyatt ha anunciado la apertura del antiguo hotel de Meliá que ha rebautizado el hotel como The Resort at Coco Beach, a Hyatt Affiliated Hotel, según El Confidencial. La propiedad, con 579 habitaciones frente al mar en la costa noreste de la isla, ha pasado a manos de la firma independiente de gestión en inversión hotelera Aimbridge Hospitality. En la actualidad, esta compañía administra 850 hoteles de marcas de primer nivel como Marriott, Hilton o Hyatt…