Desde septiembre, esta ciudad será una suerte de campo experimental para la competencia que se espera en el país entre las líneas aéreas cuando las de bajo costo comiencen a operar con más rutas y frecuencias. Tres empresas -una de ellas, low cost- cubrirán la ruta Córdoba-Santiago de Chile y ya se ve competencia de precios.
Aerolíneas Argentinas arrancará a volar esa ruta el 10 de septiembre (con tres vuelos semanales) a un valor desde US$ 186,70 finales ida y vuelta; Latam (que ya cubre el tramo desde hace años) tiene tarifas -para esa misma época- a partir de los US$ 260 con impuestos, mientras que la de bajo costo Sky ofrece desde US$ 32 por tramo en su tarifa más baja (la llama «ligtht» y no permite equipaje en bodega) más las tasas e impuestos, con lo que el pago total es de US$ 167,48.
La existencia de tarifas mínimas reguladas que no pueden ser perforadas por las empresas es determinante para que, en una compra de pasajes hecha con anticipación, no haya prácticamente diferencias entre una propuesta de bajo costo y una tradicional.
Fue, precisamente el CEO de la chilena Sky, Holger Paulmann, quien planteó en una entrevista con LA NACION la necesidad de eliminar la tarifa mínima y reducir las tasas aeroportuarias, como los dos elementos fundamentales para que las aerolíneas low cost puedan realmente prosperar en la Argentina.
Desde 2000 en la Argentina existe en el país un sistema de bandas tarifarias, con un mínimo y un máximo, que es en el que se deben mover las aerolíneas, por eso no habrá precios «regalados» de las low cost como sí sucede en otros lugares del mundo.
La decisión del Ministerio de Transporte es no eliminar ese esquema; apuesta a que los precios sigan fijos -como lo están desde hace tres años- y así irán perdiendo peso por efecto de la inflación acumulada y de la apreciación del dólar…
