Las nuevas aerolíneas, o las ya existentes que han extendido su presencia a Centroamérica, han causado un aumento de la oferta y una consecuente caída de los precios (aproximadamente del 50%). El viaje de Costa Rica a México que hace dos años podía costar 500 dólares, ahora es fácil de encontrar por 300. Las tradicionales aerolíneas de la región, Avianca y Copa, se han visto obligadas a reaccionar ante este fenómeno y, a principios de 2015, establecieron una tarifa de 100 dólares para el vuelo San José-Lima. Así las cosas, unos 15.000 ticos visitaron Perú en la primera mitad del año.
Cuando Francisco Correa, profesional de mercadeo, vio cuánto le costaba volar de San José a Managua, sacó calculadora, incorporó gastos adicionales y decidió recorrer en coche los 340 kilómetros que separan ambas capitales. Las tarifas no bajaban de 600 dólares y llegaban fácilmente a los 1.000, casi como si volara a España. "Viaje San José-Managua. La escala en Madrid no está incluida en el precio", ironiza Correa.
A la ruta San José-Managua, no le ha llegado el brote de vuelos de mediano coste que dan sus primeros pasos en otros trayectos de Centroamérica
A la ruta San José-Managua, no le ha llegado el brote de vuelos de mediano coste que dan sus primeros pasos en otros trayectos de Centroamérica, como de México a Guatemala, Costa Rica o Panamá; además de otras rutas desde Colombia a países centroamericanos. Esta región parece haber rasgado el dominio de las aerolíneas tradicionales: Avianca y Copa.
Sin llegar ni a acercarse a los vuelos de bajo coste, asentados en Europa, los servicios alternativos de aerolíneas han inyectado en los últimos dos años competitividad y una reducción de las tarifas de aproximadamente el 50%, según fuentes del sector. Ahora, un viaje de Costa Rica a México se puede conseguir por 300 dólares y no por 500.
Aunque la demanda entre algunas capitales, como San José y Managua, no es muy alta, estas cifras podrían crecer si las tarifas fueran más atractivas para los turistas. Algo que ya ha ocurrido en otros destinos de más tránsito, como Guatemala, El Salvador o Panamá, dentro de la llamada zona integrada: toda la cintura continental "”45 millones de habitante"” que abarca a los países ubicados entre México y Colombia.
"El tema importante es la falta de oferta. Nuestra meta es llegar al 40% del mercado, ¿cómo podemos hacerlo? Obviamente las tarifas son la clave", decía en julio al diario La Nación Joe Mohan, director general de Viva CAN, hermana de Viva Colombia y Viva Aerobús (México). Con vuelos cortos, sin necesidad de servicios de comida y con pasajeros con poco equipaje, Centroamérica parece una buena opción para tarifas de mediano coste, coincidió Fernando Naranjo, exgerente de Taca (fusionada con Avianca) y actual director de la aerolínea Volaris para Costa Rica. Lo del bajo coste dependerá de la demanda y factores añadidos, como los impuestos para extranjeros, la infraestructura y la falta de un documento único de viaje.
Viajes por 100 dólares
Las aerolíneas Avianca y Copa saben que la competencia viene fuerte y ya han reaccionado con promociones y mayor frecuencia de vuelos. Un ejemplo es la tarifa de 100 dólares que aplicaron a principios de 2015 para la ruta San José-Lima, saliéndose incluso de los márgenes centroamericanos. Unos 15.000 ticos aprovecharon la oportunidad y viajaron a Perú en la primera mitad del año, lo que llevó a los Gobiernos a suprimir el requisito de visas entre sí "”condición necesaria para que Costa Rica se sume al bloque de la Alianza del Pacífico"”. Así de claro: las tarifas condicionan los flujos de personas y estos las políticas de integración…