La nueva concesión que estructura el Gobierno Nacional para el aeropuerto Alfonso Bonilla Aragón de Cali y otros cuatro terminales de la región, plantea inversiones por $1,2 billones.
Según Louis Klein, presidente de la Agencia Nacional de Infraestructura, ANI, este nuevo contrato está en fase de factibilidad, por lo que enfatizó en que hay suficiente tiempo para la discusión con gremios y autoridades del Valle, con el propósito de diseñar el mejor proyecto para la región.
Actualmente el aeropuerto de Cali es operado por la firma Aerocali, pero la concesión termina en 2020, por lo que se trabaja en la estructuración del nuevo contrato que incluirá las terminales de Cali, Buenaventura, Neiva, Huila y Armenia. Esta será una iniciativa privada (APP) que está originada (propuesta) por Aerocali.
“La mayoría de las nuevas inversiones deben realizarse en los primeros años y gran parte de estas se enfocarán en los aeropuertos de Cali y Buenaventura”, dijo Klein en el foro “Un aeropuerto para impulsar la competitividad del Valle”, organizado por los gremios del departamento.
Entre las obras que se realizarían en el Bonilla Aragón estarían: la remodelación del muelle nacional, la compra de predios para la segunda pista, una nueva torre de control y en Buenaventura prácticamente se tendría una nueva terminal.
La concesión se adjudicaría a mediados del 2020 y la expectativa es que el Alfonso Bonilla Aragón llegue a mover más de 10 millones de pasajeros.
¿Qué pide el Valle?
Desde diferentes sectores del Valle del Cauca se le pidió a la ANI que se estructure una concesión que genere estímulos para las aerolíneas, pues consideran que el actual contrato tiene inflexibilidades que afectan los costos para la operación de más empresas, lo que se refleja en menos oferta para los usuarios.
La gobernadora del Valle, Dilian Francisca Toro, dijo que se ha venido trabajando con la bancada parlamentaria y los gremios para que la nueva concesión incluya indicadores de eficiencia, calidad, incentivos, tasas, elementos diferenciales que atraigan a las aerolíneas.
“Estamos interesados en que el contrato tenga todas las condiciones que permitan la competitividad y que efectivamente el Valle tenga un aeródromo que atraiga más pasajeros, lo que redundaría en todos los ciudadanos”, dijo.
Asimismo, María Isabel Ulloa, directora de Propacífico, reiteró que se requieren incentivos para que el concesionario esté pensando siempre en cómo atraer aerolíneas, que haya más pasajeros y que no se descuide la operación de carga porque esa puede ser una oportunidad.
“Es fundamental que el aeropuerto tenga la infraestructura pensada hacia el mediano plazo como, por ejemplo, la segunda pista”.
Sobre el tema, el director de la Aerocivil, Juan Carlos Salazar, dijo que el Gobierno ha venido trabajando en eliminar normas que afecten la competencia y señaló, por ejemplo, que hoy las empresas de aerotaxis pueden vender tiquetes, alternativa que se podría estudiar para Buenaventura, mientras se consolida la nueva concesión…
