A partir de octubre de este año Aena comienza la renovación de la pista 07L/25R del Aeropuerto de Barcelona-El Prat, proyecto que contempla una inversión de 25 millones de euros y amerita su cierre por 27 días aproximadamente, según el gestor aeroportuario, si bien el plazo de ejecución de la obra es de nueve meses, finalizando en verano de 2017. Se trata de la pista más larga de las tres en servicio cuya capacidad se verá reducida, al menos durante un mes.
Aena admite que durante los 27 días que se calculan de cierre de la pista, se ofertarán menos slots, lo que implicará que las compañías aéreas tendrán que ajustar su operación a la capacidad disponible, modificando el horario de los vuelos y en su defecto cancelando cuando la demanda supere a la capacidad.
Las obras
Según refiere Aena, estas obras fueron publicadas en el BOE nº 84 del jueves 7 de abril y la presentación de ofertas finaliza el día 3 de mayo. En concreto, la obra supone regenerar el pavimento de la pista, con actuaciones de mayor o menor envergadura dependiendo de la zona, en la regeneración del pavimento de la pista principal, calles de salida y del balizamiento de pista. En función de la zona, se actuará en toda la sección del pavimento, sólo en las capas de rodadura e intermedia o se llevarán a cabo reparaciones puntuales.
En las calles de salida R1, R5 y R6, se regenerará igualmente el pavimento de algunos tramos. También se adecuará la geometría de la calle de rodaje R1 para que pueda ser considerada salida rápida. Esto permitirá disminuir los tiempos de ocupación de pista.
En cuanto al balizamiento, se sustituirán las luces de pista por tipo LED para mejorar la eficiencia energética y optimizar el mantenimiento. Durante el período de obras se sustituirán las canalizaciones de cableado y los circuitos primarios de pista por nuevos y se actuará en la eliminación de algunos obstáculos en la franja de pista. La pista sobre la que se realizará esta intervención entró en servicio en 1948 y los últimos trabajos de regeneración se llevaron a cabo en el año 2005.
«Las obras implicarán la utilización de la configuración nocturna, es decir, pistas cruzadas en configuración preferente o pista única del mar en configuración no preferente. De las opciones posibles, la configuración nocturna es la que menos afecta medioambientalmente y es la que se utilizará durante el período de obras», apunta Aena, agregando que la capacidad de esta configuración es inferior a las pistas paralelas, lo que provoca la reducción de capacidad durante el tiempo que permanezca cerrada…
