La idea surgió por una promoción ¡genial! Un pasaje de México DF a Buenos Aires en business a precio de ganga. La australiana Christine Krzyston quedó encantada con la oferta. Y no lo dudó. Compró el pasaje. Y partió desde Chicago para hacer la conexión en la capital mexicana hacia la Argentina, sabiendo que el trasbordo en el DF podría ser un auténtico dolor de cabeza, con largas colas en migraciones. Pero no le importó. Y partió feliz.
Hasta ahà todo bien. Sólo que Kryzston olvidó pagar el arancel para entrar en Argentina. Y sin el pago, no había manera de subir al avión en el DF rumbo a Buenos Aires. En Chicago ya le habían dado la tarjeta de embarque MEX-EZE. Pero media hora antes de embarcar en México le avisaron que no podía viajar sin el comprobante de pago del arancel.
El obstáculo la tomó totalmente por sorpresa. Creyó que al llegar a Ezeiza podría pagar el arancel. Pero no. Confiesa que fue su error. Que lo dio por sentado. Tenía media hora para hacer el trámite. Perdía el avión. Salió de la zona de embarque. Corrió por el aeropuerto buscando una computadora donde pagar online el arancel e imprimir el recibo. En la primer terminal la impresora no andaba. En la segunda, había un caos de gente. Y el reloj corría. Ocurrió un milagro: el vuelo se retrasó. Y Christine logró subir al avión con su recibo, y ¡Chau México. Hola Buenos Aires!
La estadía en Buenos Aires estuvo genial, dice Christine, y rápidamente hubo que volver a casa. Y ahà fue donde empezó la pesadilla.
Hizo el check in online de sus vuelos y se fue a Ezeiza a buscar las tarjetas de embarque en el mostrador. La amiga que viajaba con ella consiguió las suyas sin problemas, mientras que las de ella salieron impresas con las ominosas letras: "SSSS" (America"™s Secondary Security Screening Selection o Selección de Monitoreo de Seguridad Secundario de EE.UU.) Christine estaba frita…
