En diciembre de 2016 la aerolínea Flybondi presentó a las autoridades un plan de negocios para insertarse en el mercado aercomercial argentino y convertirse en la «primera low cost» nacional.
Por primera vez en 11 años, el Estado habilitó el pedido de nuevas rutas para volar a lo largo y a lo ancho del país. En ese contexto, tanto los profesionales históricos del sector como los representantes de los seis gremios aeronáuticos se mostraron escépticos y muchos se pronunciaron en contra del proyecto presentado por el CEO de la firma, el suizo Julian Cook, señala Apertura.
Entre los puntos más cuestionados estaba el financiamiento. ¿De dónde saldrían los fondos para fundar una nueva aerolínea?
Casi ocho meses después de la audiencia pública, Flybondi confirmó una recaudación de u$s75 millones "adicionales al capital inicial de la fase de start-up" y aclaró cómo está compuesta su cartera de inversores. El principal es Cartesian Capital Group LLC.
En segundo plano, la firma menciona a Yamasa Co. Limited y otros importantes inversores de la industria como Michael Cawley -ex COO en Ryanair Holdings- y Michael Powell – ex CFO en Wizz Air Holdings. Todos tendrán a un representante en el directorio.