Las obras en el Aeropuerto Internacional de Santiago debían estar listas en noviembre del 2020, sin embargo, se proyecta que la ampliación concluya en abril del 2021. Dos veranos más que, según indicó Juan Andrés Fontaine, Ministro de Obras Públicas, en entrevista con CNN Chile, los pasajeros continuarán «sufriendo las incomodidades de un aeropuerto que funciona mal porque hay una obra grande en construcción».
Pese al panorama, el ministro reiteró que el diseño actual del aeropuerto está diseñado para 16 millones de personas, pero actualmente transitan por él cerca de 23 millones de pasajeros al año. El nuevo diseño ampliaría aún más la capacidad, «de 30 a 40 millones dependiendo si se ocupa a horas valle».
Y pese a que algunos dudaban de la capacidad de la ampliación, y que ésta quedaría chica solo unos años después de su inauguración, el titular de la cartera lo descartó. “Doy fe de que, con todos los estudios que he visto, el aeropuerto va a operar varios años después de su inauguración el año 2021 con capacidad suficiente y va a ser una infraestructura moderna y cómoda”, sostuvo.
Si bien descartó que la ampliación quede chica al 2023, sí agregó que llegará a su capacidad «hacia fines de los años 20′. Ahí se va a notar», por lo que, agregó, «tenemos que empezar a trabajar muy pronto, para efectos de no llegar tarde», evitando enfrentar nuevamente, colapsos como los que ha enfrentado el terminal en el último tiempo.
