El aeropuerto proyectado en Santa Lucía presentará problemas de saturación a los 10 años de entrar en operación en 2021, ya que en su primera etapa solo tendrá capacidad para atender las operaciones relativas a dos aerolíneas, una demanda de 18 millones de pasajeros al año. Además, el estudio sobre el espacio aéreo, realizado por la empresa NavBlue, filial de Airbus, no proporcionó ninguna conclusión sobre la factibilidad de utilizar de manera simultánea el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) y el de la base militar en el Estado de México para aumentar el rendimiento del tráfico.
Así lo indica la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA), modalidad regional del proyecto “Construcción de un aeropuerto mixto civil/militar con capacidad internacional en la Base Aérea Militar No. 1 (Santa Lucía, Estado de México), su interconexión con el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México y reubicación de instalaciones militares”, elaborada por el Instituto de Ingeniería de la UNAM para la Secretaría de la Defensa Nacional, promovente del proyecto, cuya consulta pública fue abierta el 16 de mayo por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
“Suponiendo que el AICM y el Aeropuerto Internacional de Toluca (AIT) no experimenten saturación, y el flujo excedente de pasajeros sea atendidos en el Aeropuerto Internacional de Santa Lucía (AISL), se estima que este aeródromo comience a experimentar problemáticas de saturación en 10 años a partir de su puesta en servicio (2031)”, señala el documento. La construcción del aeropuerto de Santa Lucía se justifica en la saturación del AICM desde 2014, cuya capacidad se rebasa con 32 millones de pasajeros al año, por lo que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) impulsa el “Sistema Aeroportuario Metropolitano” para redistribuir el tráfico aéreo entre los aeropuertos capitalino, de Toluca y Santa Lucía, como alternativa a la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), que tenía una capacidad proyectada de 70 millones de pasajeros en su primera fase.
Sin embargo, aunque el nuevo sistema aeroportuario logrará desahogar las operaciones del AICM, que concentra 98 por ciento del tráfico, no aumentará considerablemente la capacidad para atender a los pasajeros que ahora recibe la terminal capitalina, reconoció la MIA. “A partir de ese año (2021), el crecimiento de operaciones y pasajeros que serán atendidos en el sistema AICM-AISL se estima que se estabilizará entre 30 y 35 millones de pasajeros anuales, lo que propiciará un muy buen nivel de servicio en ambos aeropuertos”, destaca. Además, como ya lo había anunciado el director de la Escuela Militar de Ingenieros y encargado de la obra, Gustavo Vallejo, el aeropuerto de Santa Lucía tendrá su máximo potencial dentro de 50 años, con una capacidad de 100 millones de pasajeros al año, “que complementados con el AICM y el Aeropuerto Internacional de Toluca pueden llegar a 140 millones de pasajeros anuales”.
Respecto a la falta de conclusiones sobre la factibilidad de utilizar de manera simultánea AICM y AISL, la MIA, elaborada por Arturo Palacio Pérez, coordinador de Ingeniería de Procesos Industriales y Ambientales de la UNAM, destacó: “NavBlue establece que la decisión final se deberá complementar con otros aspectos, y que cualquier decisión relacionada con el proyecto no se deberá basar únicamente en el estudio realizado por dicha consultora”…